Por Ivette Leyva Martínez
Una historia que ha circulado ampliamente en Internet sobre un chef cubano que deleita con sus creaciones a la realeza británica es falsa, confirmó el Palacio de Buckhingham. "A ese personaje no lo conoce nadie en el palacio", dijo entre risas un miembro de la oficina de prensa del palacio, quien agregó que había tenido conocimiento de la historia el fin de semana pasado. La entrevista, atribuida a una publicación identificada como Olé, tiene como protagonista a un supuesto marielito del poblado pinareño de Pilotos, Elio Gutiérrez, quien había logrado convertirse en chef de la familia real británica. El texto fue reproducido total o parcialmente en al menos 3,500 sitios digitales en Internet.
"A la Reina le encantan los tostones de fongo rellenos de camarones al ajillo y la sopa de malanga. A su esposo, el Príncipe Philip, lo que le priva son las frituritas de seso. Charles es adicto a los platanitos en tentación y al congrí con chicharrones. Camila al arroz con pollo. Los príncipes, tanto Harry como William, son bien dulceros. Para ellos elaboro boniatillo y buñuelos pinareños que llevan un toquecito especial de nuez moscada con canela fina de la India", dice uno de los fragmentos más hilarantes de la entrevista apócrifa. La entrevista llegó incluso a incluir una fotografía del "chef Gutiérrez" en sus presuntos avatares culinarios.
La historia, sin embargo, tiene varios puntos flacos, entre ellos la mención de un aristócrata inexistente, "Duke de Rutherford-Leigh", y la afirmación del supuesto chef de que tuvo que importar yuca y frijoles negros desde Miami, pues -según afirma el artículo- "no existe en Londres manera de conseguir los ingredientes". Ambos ingredientes se consiguen en los mercados británicos.
Olé, a la que habría sido concedida la entrevista, es una reconocida publicación dedicada al fútbol.
Tomado de: Café Fuerte/9 de junio de 2011
Comentario editorial: es una pena que al inventor de la historia no se le haya ocurrido sugerir que todas las mañanas S.M.B. Elizabeth II se despierta con un cafetazo mezclado al 50% de Petit-Pois Ground…
¿Cómo es posible que los cubanos seamos tan ingenuos (o tan engreídos) que empecemos enseguida a mandarles estas historias hasta al último gato que conocemos haciendo un papelazo ridiculísimo? ¿No vemos desde el principio que el “artículo” dice “parece como que” y “tostones de fongo”? Dos frases no cubanas. ¿Qué rayos es “fongo”?, ¿hongo?, ¿o mofongo? Las 13 curiosidades cubanas nos puso a correr.