Periódico oficial cubano (re)marca el camino al capitalismo

Por Rogelio Manuel Díaz Moreno

Cada día que transcurre permite apreciar evidencias reveladoras de un fenómeno inevitable: la burocracia todo-centralizadora, que intenta dominar y controlar cada aspecto de la vida económica y social del país mediante métodos autoritarios, al comprender que no tiene manera de montar un sistema económico, eficiente y funcional bajo el monopolio estatal, prepara la transición hacia esquemas capitalistas con la aspiración a mantenerse en puestos de privilegio mediante la metamorfosis de funcionarios a empresarios.

Hace un par de semanas denunciábamos el inicio de la entrega de centrales azucareros a capitalistas extranjeros, bajo el eufemismo de contratos de administración. Veamos esta vez un par de perlas del diario oficial del Partido-Estado-Gobierno, que ilustran perfectamente más escenas de esta tragicomedia.

La incapacidad estatal de asegurar la distribución de toda la producción agropecuaria generada por los campesinos es un mal especialmente doloroso en el contexto nacional de insuficiente producción de alimentos. Quienes siguen la sección Cartas a la dirección habrán encontrado en los últimos días un intercambio que desnuda este fenómeno de una manera muy particular. Ayer, veamos, se publicaba una misiva del Director General de la Empresa de Conservas de Vegetales, que explicaba por qué ciertas unidades en Santi Spiritus no podían asimilar toda la producción de guayabas de un campesino que se quejaba, días antes, de contemplar cómo se le echaban a perder en el campo los quintales de la sabrosa y saludable fruta.

Esto resulta ya bastante grotesco de por sí, considerando las necesidades no resueltas de la población. Pero lo más patético está por manifestarse en otro mensaje, también acogido días antes, que revelaba la perplejidad e indignación de los trabajadores de un centro elaborador y comercializador de dulces donde podrían haber empleado muy bien las dichosas guayabas y, de tal forma, haber evitado las afectaciones económicas sufridas por falta de abastecimiento. De veras que, si esto es el resultado de la planificación de la economía que pregona el gobierno cubano, la CIA que persigue el fin del sistema que tenemos en Cuba no les está pagando a los que son en realidad sus mejores agentes.

La solución de la burocracia

Si bien Carlos Marx desnudó la falta de nacionalidad de las burguesías, otro tanto puede hacerse con las burocracias. Esto puede contemplarse cuando, ante situaciones parecidas, aquellas obran a través de los mismos mecanismos, las mismas motivaciones y miedos.

Por ejemplo, la repulsión a la idea de dar paso al poder de las personas trabajadoras. No importa cuán grande sea el caos que tienen formado los burócratas: la posibilidad de dejar, a quienes tienen en sus manos o cerebros las responsabilidades por las tareas productivas, dirigir y decidir en la administración de sus asuntos no pasa por la cabeza de la nomenklatura. Los voceros que claman su incondicionalidad al socialismo sin haberse molestado en elaborar un cuerpo teórico y filosófico que lo respalde, más allá de la necesidad de una obediencia piramidal prefieren abandonarse al capitalismo, con la esperanza de conservar posiciones de privilegio. La metamorfosis se anuncia mediante un discurso tan superficial y acomodaticio como el de la etapa anterior, que a su vez permite diagnosticar con precisión el fenómeno.

Los que primero experimentan la mutación, pueden al menos hacer gala de alguna originalidad. De aquí que el famoso eslogan enriquecerse es glorioso, del dirigente chino Deng Xiao Ping, haya resultado hasta pintoresco. Su versión caribeña, la que asoma la oreja en el Granma de ayer viernes, es simplemente patética.

En todo caso, se debe reconocer que se apoya en un estado de opinión totalmente preparado, abonado, ansioso, de recibir este tipo de exhortaciones. Ante el descrédito de las variantes anteriores a las que en mala hora se les llamó socialismo, humanamente es natural que a las personas que se les anuncia la otra variante como garantía de felicidad y bienestar, piquen el anzuelo. Con un insignificante barniz que no disimula en lo absoluto la loa cantada al empresario capitalista, presenta nuestro inefable Granma el camino de un moderno hacendado cubano, feliz empleador de un buen número de braceros que trabajan para él.

El periodista correspondiente no parece encontrar nada extraño en la relación de explotación que describe. El emprendedor patrón dirige desde bien temprano las labores de los empleados que obtienen para él, en su finca, abundantes cosechas de viandas y productos como carne y leche. Como la riqueza así generada es producto del trabajo honrado, no resulta escandaloso que el exitoso hacendado se la apropie en su mayor parte. Después de todo, le paga a sus trabajadores un buen jornal mejor que el que obtienen médicos, maestros y demás profesionales cubanos, por cierto. Henry Ford movería su cabeza en un gesto aprobador.

En vano buscará el lector detalles sobre los derechos laborales de los empleados, pues no se comenta, sino escuetamente, que la contratación de los mismos se efectúa a través de una cooperativa. A fuerza de no mencionados, las prerrogativas de asociación, seguridad social, vacaciones pagadas, licencias de maternidad y otras cuestiones de ese tipo, imagino que estén prontas a pasar a la misma categoría que los conceptos de democracia, sociedad civil, derechos humanos y otros inventos del capitalismo para manipular y perjudicar a nuestro país.

La burocracia cubana consiguió primero el dudoso éxito de despoblar las áreas campesinas con su política de restricciones, controles infinitos y acaparamiento de la dirección de la actividad agropecuaria. En estos tiempos no le interesa, evidentemente, el regreso al paradigma de unidades familiares o cooperativas que hagan progresar la actividad económica campesina de manera autónoma, libre, que concierten directamente con los consumidores la comercialización de sus productos y sin explotaciones de por medio. Al menos, en este reportaje que nos ocupa, se proclama abiertamente que ojalá hubiera más empresarios como el descrito. Puerilmente se intenta obviar el hecho que el sudor que produce su riqueza es mayoritariamente ajeno y que, para que haya un hombre que acumula fortuna así, tiene que haber un buen número de otros que no puedan hacer otra cosa sino subordinársele.

Con tal de que haya alimentos, todo es aceptable, se indica sin ninguna clase de rubor. Entonces, para arreglar las cosas que han funcionado mal todos estos años, ¿lo correcto es entregarlos al sector privado? Con tal de que retornar hospitales y escuelas, hoy en mala situación, a un estado funcional, ¿deberíamos privatizarlos? ¿Podríamos fomentar contratistas de seguridad privados, bancos, aerolíneas, maquiladoras, siderúrgicas, todas basadas en la propiedad privada y la contratación de trabajo asalariado? Con base a los materiales que he leído en el Granma, aprecio que el periódico del Partido-Estado-Gobierno, en estos tiempos, se inclina hacia la respuesta afirmativa.

El delito de opinión en la Reforma Migratoria

Por Marlene Azor Hernández

Todos los ciudadanos cubanos agradecemos a “Su Majestad”, el Gobierno de Cuba, por disminuirnos los diezmos en 300 cuc (tarjeta blanca y carta de invitación) y permitirnos estar fuera de Cuba 24 meses sin tener que pagar el diezmo mensual, por ser “propiedad” del Estado cubano.

Alguien no enterado de las arbitrarias leyes migratorias cubanas, reconocería el tufo medieval, del párrafo anterior. Ninguno de estos diezmos han sido pagados durante todos estos años por el Gobierno de los EEUU, sino por los ciudadanos cubanos regados por todo el mundo. Por eso, le agradecemos a “Su Señoría” porque en realidad el embargo norteamericano no ha tenido nada que ver en el asunto.

El delito de opinión, sin embargo, sigue penalizado en la reforma migratoria con el modus operandi habitual de la aplicación discrecional de la ley. Esta vez, no tan discrecional.

El artículo 23 de la Reforma migratoria define que no pueden acceder al pasaporte para salir del país, “…cuando por razones de Defensa y Seguridad Nacional así lo aconsejen”.

¿Cuáles serían estas razones para convertir la opinión discrepante en delito contra la seguridad del Estado? Continue reading

En Cuba NO TODOS tienen derecho al estudio

Por Verónica Vega

Esta afirmación no es un mero gancho periodístico, es la conclusión derivada por los padres de dos adolescentes después de un infructuoso diálogo con la actual directora del Municipio de Educación en la Habana del Este porque a nuestros hijos Kabir y Sebastian, se les niega día tras día el acceso a su propia escuela.

¿La razón? Que no han aceptado cortarse el pelo según el criterio estético que les exige la directora del preuniversitario Lázaro Peña, en Alamar, amparada en una normativa dictada por la actual ministra de Educación.

Según palabras textuales de Leticia, la directora municipal: “LA ESTÉTICA ES MÁS IMPORTANTE INCLUSO QUE LA DIGNIDAD” ¡!

Esta fue su respuesta cuando le expresamos que nuestros hijos elegían ser sinceros y dignos, y no someterse por miedo a un canon machista (y anticonstitucional) defendiendo su derecho a no ser discriminados ya que las estudiantes hembras pueden llevar el pelo como les plazca aún usando el uniforme escolar (obligatorio en Cuba).

El reglamento impone a los estudiantes varones una regla extra: “estar correctamente pelados y afeitados”.

Que el término “correcto” sea relativo y no aparezca en ningún artículo legal, no parece importar mucho a los funcionarios de Educación, quienes (según expresó la propia directora del municipio) han recibido vía oral en reuniones internas la definición concreta de “correcto”: el corte militar, a pesar de que en el documento de marras no se especifica el largo de centímetros permisible para los pobres varones, a quienes la naturaleza parece haber provocado un serio daño con el don de que les crezca el pelo. Continue reading

También en Cuba menos del 1% deciden


Por Pedro Campos

Se ha convertido en una consigna movilizadora de las mayorías en EEUU y el mundo capitalista, que menos del 1 % de su población, compuesto por millonarios, es quien verdaderamente tienen el poder económico y político y deciden todo lo importante en esos países.

El VI Congreso del Partido Comunista de Cuba aprobó los Lineamientos para la política económica y social, que a su juicio deberán regir los destinos de Cuba. Dichos Lineamientos no fueron sometidos a votación de todo el Partido, ni desde luego a referendo popular. Los pocos cientos de delegados al Congreso, no llegaron ni al 0.05 % de la población.

Y esto se hace en nombre del artículo 5to de la Constitución, que reconoce el papel dirigente del Partido Comunista en la sociedad cubana; lo cual, en cambio, entra en contradicción flagrante y viola el espíritu de soberanía, democracia y republicanismo de toda la carta Magna y la letra específica de varios de sus artículos, tales como:

el artículo 1ro que establece: “Cuba es un Estado socialista de trabajadores, independiente y soberano, organizado con todos y para el bien de todos, como República unitaria y democrática, para el disfrute de la libertad política, la justicia social, el bienestar individual y colectivo y la solidaridad humana”.

el artículo 3ro que señala. “En la República de Cuba la soberanía reside en el pueblo, del cual dimana todo el poder del Estado. Ese poder es ejercido directamente o por medio de las Asambleas del Poder Popular y demás órganos del Estado que de ellas se derivan, en la forma y según las normas fijadas por la Constitución y las leyes.”

Hoy todo el sistema político-económico-social actual se sustenta en “el papel dirigente del PCC”, el cual funciona de acuerdo con el Centralismo Democrático, donde lo primero determina sobre lo segundo, lo cual trae por consecuencia que sea una pequeña elite dirigente la que determine y decida todo, no solo en el partido, sino en la sociedad.

No por gusto quienes ocupan los cargos principales del gobierno y el consejo de estado, son a la vez, los mismos que ocupan los cargos centrales en el partido.

Es, desde ese centro dirigente, de donde salen todas las leyes, que vienen además en forma de decretos, discutidas y aprobadas luego por la Asamblea Nacional. Ninguna ley es sometida a referendo popular como debería ser en una democracia directa, verdadera.

¿Y el sistema representativo del Poder Popular y su Asamblea Nacional? La Asamblea Nacional está compuesta por menos de mil diputados, menos del 0,01 %. El 50 % de sus candidatos, son designados desde “arriba” y el otro 50 % desde las comisiones electorales controladas por el partido en las provincias y aunque tienen iniciativa legislativa reconocida, en la práctica solo están para aprobar lo arriba dispuesto.

Hoy, es esa Asamblea Nacional, con diputados cuasi designados, la que elige al Consejo de Estado y al Presidente del Consejo de Estado y de Ministros. No es el pueblo directamente quien lo hace.

De manera que puede afirmarse categóricamente, que también en Cuba, menos del 1 % de la población es el que está decidiendo los destinos de más de 11 millones de cubanos, el 99 y tanto % restante.

Es difícil, en las circunstancias actuales, establecer un camino para revertir esa situación. El que sea, tendría que ser pacífico y por medio del diálogo y la negociación. El sectarismo y la obcecación del partido-gobierno le impiden emprender esa ruta, a diferencia de la izquierda democrática y socialista que no está atada a dogmas, prejuicios ni exclusiones, partidaria y proponente de un diálogo nacional sin exclusiones.

Al respecto, recordamos que fue nuestro compañero Félix Guerra, poeta, escritor y periodista, comunista de siempre, quien en marzo del 2009 hizo un llamamiento al Congreso de la Nación y fue nuestro compañero Félix Sautié, periodista, economista, teólogo y comunista de siempre, también, quien escribió en el 2007 un libro con el título “Socialismo y reconciliación en Cuba. Una mirada desde adentro”.

Si queremos que ese 99 y tanto por ciento de la población participe de la decisión sobre sus destinos, si pretendemos que la socialización y democratización de la economía y la política, -el proceso revolucionario-, siga avanzando y se reduzcan las posibilidades de un retorno al régimen de oprobio y al capitalismo más vulgar y hediondo.

No queda más alternativa a la izquierda no dogmática, que promover, por ella misma, y llevar a vías de hecho, ese diálogo con todos y para el bien de todos, toda vez que el gobierno-partido no acepta el reto.

De ser la derecha la que encabece la crítica al modelo burocrático de corte neo-estalinista, la lucha por ese diálogo, por el respeto a los derechos de todos los cubanos, por la democratización del sistema político, por las libertades de expresión y asociación, por el libre acceso a internet, por la libertad de elección de los cubanos y por enfrentar las arbitrariedades del “socialismo de estado”, estarían garantizados la restauración del capitalismo privado, la democracia burguesa y el fin del intento socialista en Cuba.

Para quienes no lo entiendan: para evitar que eso pueda ocurrir, fue que algunos compañeros, participamos en la confección y firmamos el Llamamiento urgente por una Cuba mejor y posible”.

Publicado en Havana Times

Al paso, la Constitución

Por Rogelio M. Díaz Moreno

Ahora que ya pasó el acto del 26 de julio, resulta que yo todavía no me he terminado de desconectar de la pasada sesión del Parlamento cubano, celebrada hasta el 23 del presente mes. Y es que yo no quería pasar por alto un último punto del discurso del compañero general en jefe, Raúl Castro, allí al finalizar prácticamente su discurso de la clausura, cuando hace la apología del compañero Jaime Crombet.

Dijo Raúl, según la versión que descargué del sitio oficial Cubadebate, En consideración a sus relevantes méritos, […], el compañero Jaime trabajará conmigo en la atención a la comisión que elaborará el proyecto de modificaciones a introducir en la Constitución de la República, en cumplimiento de los acuerdos del Sexto Congreso del Partido

Así que, de pronto, nos enteramos de un par de cosas importantes: Se ha conformado o conformará una comisión para proponer modificaciones a la Constitución.

Era algo que muchos veíamos venir, si bien no todos estaban convencidos de que fuera lo más conveniente. Algunos amigos versados en cuestiones de Derecho, por ejemplo, me han explicado que la Constitución actualmente vigente no ha sido nunca aprovechada por completo pues, para empezar, le faltaron algunos complementos jurídicos que se suponía se elaboraran para definir detalles en temas como ciudadanía, el ejercicio de derechos de asociación, etc.; lagunas que resultaban en que las autoridades actuaban a discreción en esas cuestiones para disgusto digamos que de aquellos a los que no les gustaba su actuación. Eso, cuando no se cometía un burdo y abierto desacato como con la prohibición, derogada no hace tanto, de entrada de los cubanos a establecimientos hoteleros.

Por otra parte, las conocidas reformas realizadas al modelo cubano o actualizaciones, como prefiere llamarles el discurso oficial ya dieron al traste, según mi humilde opinión, con un par de preceptos constitucionales como aquel de proscripción de la explotación de unas personas por otras, insostenible frente a la existencia de la contratación de fuerza asalariada por parte de algunos de los pequeños empresarios autorizados a ello con el auge, legalmente promovido, del llamado trabajo por cuenta propia. En todo caso, con tanta actualización o reforma o renuncia del Estado a garantizar trabajo, planes vacacionales y el resto de la filosofía de eliminar subsidios y subvenciones a la población, las sacudidas experimentadas por la Carta Magna cubana han sido tantas que lo más práctico, para poder hablar de un documento que todos consideren digno de alguna atención, es reformarla.

Lo que quiero subrayar es, de nuevo, que ya se decidió crear una comisión para redactar el proyecto de modificaciones de la Constitución. ¿En qué momento, tengan la bondad de decirnos? ¿Quiénes tomaron la decisión? ¿Cómo se va a elegir a los integrantes de la misma? ¡Fíjense que no es una comisión cualquiera, para elegir el color de un estadio de pelota, es para cambiar la Constitución! Una cosa se sabe, que Raúl y Crombet la van a atender. ¿De la manera en que un anfitrión atiende a unos huéspedes? ¿Cómo un archivador atiende a personas que requieren información? ¿O de otra manera?

Además, me parece que hay otras contradicciones. Dice Raúl, en cumplimiento de los acuerdos del Sexto Congreso del Partido. Pero en la versión que yo descargué, también de Cubadebate, de la versión final de los Lineamientos aprobados en el VI Congreso, no aparece la propuesta de reformar (o actualizar) la Constitución. Lo que es más, el PCC no tiene la potestad para cambiar la Constitución de Cuba, derecho que solo posee la Asamblea Nacional del Poder Popular, según el artículo 137 de la misma Constitución. Tampoco se encuentra el PCC entre las personas naturales o jurídicas con Iniciativa Legislativa, o sea, que puedan proponer leyes en la Asamblea, según el artículo 88 del documento en cuestión. Si alguien tiene una información mejor que la mía, por favor compártala.

Ante esta situación, me vienen a la mente ciertas palabras de José Martí, en una carta a Máximo Gómez. En esa misiva Martí, sin ocultar el cariño y admiración que siente por el Generalísimo, le expresa su opinión de que

entiendo que usted procede de buena fe en todo lo que emprende, y cree de veras, que lo que hace, como que se siente inspirado de un motivo puro, es el único modo bueno de hacer que hay en sus empresas. Pero con la mayor sinceridad, se pueden cometer los más grandes errores; y es preciso que, a despecho de toda consideración de orden secundario, la verdad adusta, que no debe conocer amigos, salga al paso de todo lo que considere un peligro, y ponga en su puesto las cosas graves, antes de que lleven ya un camino tan adelantado que no tengan remedio.

La escribió Martí, a raíz de un desacuerdo con la manera, de Gómez y Maceo, de planificar la próxima y definitiva contienda para liberar a Cuba del colonialismo español. Martí que contaba con la independencia de Cuba para revertir la expansión del imperialismo yanqui sobre Latinoamérica le expresó al Generalísimo que, no obstante su amor ciego a una idea en la que me está yendo la vida; a pesar de desbordar por él esta fatal abundancia de corazón que me dañaría tanto en mi vida, si necesitase yo de andar ocultando mis propósitos para satisfacer ambicioncillas; que, no obstante dudar que se hubieran acercado a aquel alguien más con un afecto más caluroso que aquel con que lo apreté en mis brazos desde el primer día en que le vi; en fin, que con todo ello, no iba a contribuir con los planes esbozados en la discusión que provocó esta misiva, pues hay algo que está por encima de toda la simpatía personal que usted pueda inspirarme, y hasta de toda razón de oportunidad aparente.

Yo espero que a nadie le moleste que un humilde servidor sienta tanta admiración por las ideas de Martí que trate de hacerlas suyas, derecho que, por demás, nos asiste a todos los cubanos. Pienso que hay que tratar de meditar en lo que estaría pensando Martí al escribirle a Gómez en este mismo mensaje, que

un pueblo no se funda […] como se manda un campamento; y cuando en los trabajos preparativos de una revolución más delicada y compleja que otra alguna, no se muestra el deseo sincero de conocer y conciliar todas las labores, voluntades y elementos que han de hacer posible la lucha armada, mera forma del espíritu de independencia […] ¿qué garantías puede haber de que las libertades públicas, único objeto digno de lanzar un país a la lucha, sean mejor respetadas mañana? […] Si la guerra es posible, y los nobles y legítimos prestigios que vienen de ella, es porque antes existe, trabajado con mucho dolor, el espíritu que la reclama y la hace necesaria: y a ese espíritu hay que atender, y a ese espíritu hay que mostrar, en todo acto público y privado, el más profundo respeto.

Lo que me parece muy a tono con el propósito de redactar una nueva Constitución para el país o para modificar la vieja. Sobre todo, teniendo en cuenta que Martí la tenía mucho más difícil que nosotros hoy, pues el país que los mambises todavía tenían por liberar de una potencia colonial, hoy ya cuenta con la soberanía necesaria para desarrollarse y mejorar las condiciones para que su pueblo trabaje por una felicidad posible, sin olvidar hacer frente a los apetitos imperiales de otra potencia que conocemos bien.

Resulta totalmente improcedente que las propuestas de modificaciones a la Ley de Leyes provengan, como ya ocurrió en el caso de los documentos del Congreso y la Conferencia del PCC, del trabajo de una comisión desconocida, trabajando en secreto. Me resulta inconcebible. Este pueblo, llamado a construir en el umbral mismo del imperialismo yanqui el proyecto liberador, emancipador, antiimperialista, del socialismo; que efectuó una Revolución inédita que ha conmocionado al mundo más de una vez, y lo seguirá conmocionando, no puede sino efectuar en la más abierta y democrática asamblea las discusiones que deriven en una nueva Constitución. La única manera de rechazar indefectiblemente las embestidas del enemigo y derrotar para siempre sus esperanzas de fragmentarnos para borrar nuestro ejemplo de la faz de la tierra, consiste en la unidad basada en la igualdad y el respeto a cada compatriota, la participación universal y plena de los talentos de todos los cubanos y cubanas, militantes o no, con sinceridad y transparencia, con libertad y compromiso, en los hitos de la sociedad que forjamos.

Islandia: Revolución en curso

por Deena Stryker y Daily Kos

Los islandeses piden responsabilidades por la crisis económica- BOB STRONG (REUTERS)

Un programa radial italiano hablando sobre la revolución en curso de Islandia es un ejemplo impresionante de lo poco que nuestros medios de comunicación nos dicen sobre el resto del mundo. Los estadounidenses pueden recordar que al inicio de la crisis financiera de 2008, Islandia, literalmente, se declaró en quiebra. Las razones se mencionan sólo de pasada, y desde entonces este miembro poco conocido de la Unión Europea (*) volvió a caer en el olvido.

Como los países europeos caen uno tras otro, poniendo en peligro el euro, con repercusiones para todo el mundo, la última cosa que los poderes desean es que el caso de Islandia se convierta en un ejemplo. He aquí por qué:

Cinco años de un régimen puramente neoliberal había hecho de Islandia, (población de 320.000 personas, sin ejército), uno de los países más ricos del mundo. En el año 2003 todos los bancos del país se privatizaron y en un esfuerzo por atraer inversionistas extranjeros ofrecieron préstamos en línea, cuyos costos mínimos les permitió ofrecer tasas relativamente altas de rendimiento. Las cuentas, llamadas “Icesave”, atrajeron a muchos pequeños inversores ingleses y holandeses. Pero a medida que las inversiones crecieron también lo hizo la deuda de los bancos extranjeros. En 2003 la deuda de Islandia era igual a 200 veces su PIB, pero en 2007 fue del 900 por ciento. La crisis mundial financiera de 2008 fue el golpe de gracia. Los tres principales bancos islandeses, Landbanki, Kapthing y Glitnir, quebraron y fueron nacionalizados, mientras que la corona perdió el 85% de su valor con respecto al Euro. Al final del año Islandia se declaró en bancarrota. Continue reading

De los lineamientos, claro-oscuros de la economía y la política

Por Ovidio D´Angelo Hernández

1RA. PARTE

Aunque se han escrito bastantes opiniones y análisis sobre los lineamientos del Congreso del Partido, deseo compartir algunas cuestiones que me han parecido importantes para determinar en que avanzan, en que se quedan cortos y en que pueden generar limitaciones peligrosas, desde mis puntos de vista.

Me concentraré aquí en la integración de diversos lineamientos, que resumo en 11 aspectos que me parecen centrales para el modelo socio-económico y político del país, todos los cuáles implican concepciones de la sociedad socialista en su conjunto y relaciones entre esos ámbitos, además del jurídico y otros.

Por un lado, creo que ello contribuye a una mejor comprensión y a evitar la dispersión de asuntos claves para el desarrollo del socialismo en el país, que aparecen en diversos lineamientos; asimismo el trabajo puede presentar un cierto mapeo articulado desde esos 11 criterios que ayude a una reflexión más profunda del documento.

Una consideración previa, a las que muchos entre ellos yo- nos hemos referido en el proceso de discusión de los lineamientos, es la cuestión de que las relaciones económicas y políticas no pueden estar separadas; unas son parte de las otras y se condicionan mutuamente, por sólo plantear dos aspectos importantes de la multitud de fenómenos en las relaciones sociales que interactúan en el Todo.

Si bien la dirección del Partido determinó priorizar los aspectos socio-económicos en el Congreso, con un grado amplio de consulta que no debate real en la población- y postergar para una Conferencia algunos aspectos generales de carácter político y organizativo social que parece se discutirían sólo entre la militancia del partido-, de hecho esos aspectos generales estarían condicionando la forma de concebir los propios lineamientos. Aquí tratamos de mostrar esa relación desde el detalle de los aspectos abordados.

La primera conclusión es que los lineamientos no sólo hay que aplicarlos, sino que deben entrar en un proceso meditado socialmente, de reflexión y reajuste progresivos, si no queremos desvirtuar el carácter socialista de la sociedad y el desarrollo social y económico a que aspiramos.

Esos 11 puntos seleccionados son los siguientes:

-Proceso de debate

-Modelo de gestión

-Formas de propiedad no estatales

-Participación social

-Control

-Descentralización-separación empresarial y estado

-Autonomía local

-Planificación socialista

-Fuentes de empleo

-Política de precios e ingresos

-Papel de las Ciencias

-Proceso de debate.

Algo que llama la atención en la página 3 de los Lineamientos, como ya se ha dicho, es que se trató de una consulta popular, constreñida a tres o cuatro posibilidades (solicitud de aclaración, enmienda, aporte nuevo, etc.) sin que se propiciara un debate de posiciones, ni previas ni durante el debate, ni sobre los resultados de las asambleas; en todo esto el papel de los medios de comunicación fue prácticamente nulo, limitándose a comentarios descriptivos y poco profundos sobre los temas en cuestión). No obstante, la realización de la amplia consulta que se ha realizado en procesos de otros Congresos del Partido y con la discusión de documentos-base del país en otros momentos- permitió una modalidad de participación popular más o menos abierta y amplia, lo cuál fue beneficioso.

El proceso que podía haber sido más transparente, socialmente, resultó fragmentado a cada lugar de consulta, lo cuál constituye un límite importante. Sin embargo, se plantea que en el análisis de la primera etapa asamblearia popular, a nivel de las provincias participaron 978 delegados al Congreso y 216 invitados en total, seleccionándose una cantidad de nuevos planteamientos, los que fueron reducidos progresivamente después en las sesiones de las Comisiones del Congreso; este proceso no fue monitoreado públicamente. Aunque parte del debate en Comisiones transcurrió de manera televisada, fueron bastante escuetos y pobres, en opinión general. No se aclararon cuáles fueron los argumentos de las propuestas eliminadas ni como las que se aprobaron implicaban cambios fundamentales del modelo económico político de la sociedad.

-Modelo de gestión.-

En el lineamiento no. 2 se identifica modo de gestión con forma de propiedad; lo cual me parece un error a superar. Esto se repite en otros lineamientos, empleándose de manera equivalente: formas productivas no estatales, gestión no estatal, formas no estatales de propiedad, etc.

En ese lineamiento se afirma, adecuadamente, una expresión más diversificada y ahora legitimada de las formas de propiedad; se plantea en el lineamiento 3 la autorización de formas de gestión no estatales, incluida el cuentapropismo, las cooperativas, etc. Esto puede abrir algo más el diapasón de empleo y fuentes de servicios y producciones de la población.

Sin embargo, la confusión inexplicable- entre formas de propiedad y modos de gestión deriva en el lineamiento 2 a que se defina la empresa estatal socialista como forma principal de la economía nacional. Esto podría tener dos lecturas: la tradicional, en que la empresa estatal sigue siendo dirigida con subordinación desde arriba y por funcionarios designados, que es lo que parece que predomina en el enfoque; o lo que debería ser, que la empresa estatal podría abrirse a nuevas formas de gestión de los trabajadores y la sociedad, de manera más socialmente autogestionada, es decir como propiedad socializada realmente y no como un instrumento de organismos del estado solamente.

En este sentido, en los lineamientos no se aborda de ninguna manera la participación de los trabajadores en la gestión de las empresas de todo tipo, aspecto deficitario que constituiría un nodo central en la concepción política socialista. Al parecer, esta participación seguiría los canales actuales de representación en los consejos de dirección de los factores que supuestamente se identifican con el sentir de los trabajadores.

En el lineamiento 4 sólo se menciona de esta participación, en el sentido de que se informarán y escucharán sus opiniones por los directores administrativos, mientras que en el lineamiento 8 se concede mayores facultades a las direcciones de las entidades. Este es un reforzamiento de los mecanismos administrativos por encima de la posibilidad que se podía abrir para la gestión y control, obreros y populares, en las direcciones empresariales de la sociedad. Por lo que no sólo estos aspectos se quedan cortos, sino que limitan el desarrollo de una relación social fundamental para el desarrollo socialista.

-Formas de propiedad no estatales.-

Ya nos referimos, anteriormente, a este punto. Primero, baste comentar que las formas cuentapropistas quedan reducidas a los 178 cargos aprobados sin que, apenas más allá de los oficios corrientes, se consideren otras profesiones diversas que pudieran aportar ingresos a las personas y servicios sociales, limitando su acción en la coyuntura económica actual a una desprofesionalización que opera en algunos casos que se deciden por esta vía de ingresos y a una limitación para muchos profesionales diversos que podrían acogerla para desempeñar un servicio útil a la sociedad, después de su jubilación o en tiempo extra a sus trabajos.

Además de las formas mixtas y asociativas internacionales, las cooperativas adquieren un espacio importante en los lineamientos. Lamentablemente, se les considera una forma no estatal de propiedad cuando debería considerárseles como formas socialistas de producción y servicios. La denominación no es gratuita, porque implicaría consideraciones importantes de su funcionamiento como empresas colectivas y asociadas a comunidades y localidades.

Hay 15 lineamientos dedicados a esta forma de producción y servicios (17, 25, 27, 29, 53, 54, 180, 189, 200, 217, 239, 291, 295, 304, 308). Plantean, en síntesis, que pueden surgir de liquidación de empresas estatales, tienen personalidad jurídica y asumen gastos e ingresos; pueden ser de primer grado y ubicarse en diferentes sectores, pueden constituirse en cooperativas de segundo grado (en actividades complementarias afines, etc.), tener relaciones contractuales con diferentes entidades y realizar ventas sin intermediarios, reciben créditos y estímulos al desarrollo, tienen autonomía de gestión, sistemas de capacitación, posibilitan la reorientación de producciones e industrias locales y de servicios, pueden dedicarse a construcción de viviendas y contarán con un comercio mayorista.

No obstante su considerable ampliación, que requerirá experimentación de formas de implementación diversas y considerarlas como una medida positiva, no alcanza la proyección referida en el segundo párrafo del comentario de este punto, como forma socialista para un desarrollo socioeconómico y político superior.

-Participación social.-

En el mismo sentido anterior, se considera en el lineamiento 30 que a las unidades presupuestadas se les define misión, función, atribución y obligaciones, etc., por lo que no aparece cuál va a ser el papel de los trabajadores y las aportaciones que pudieran hacer en ese campo organizativo empresarial.

Sólo en el lineamiento 139 se llama a estimular la creatividad de los colectivos laborales de base, en relación con su participación en el fortalecimiento de las tecnologías y la innovación, lo cuál es reduccionista en extremo. Sólo queda, de manera muy vaga, el rescate, en el lineamiento 129, de que las ciencias deben incentivar el papel de la participación de la población en la construcción socialista, lo que sigue siendo estrecho a cualquier objetivo de desarrollo propuesto..

-Control.-

Sobre el control solo hay referencias en los lineamientos 8, 11, 12, pero en la dirección de mayor exigencia a directivos por decisiones inadecuadas y daños y por el fortalecimiento del control externo a las empresas. Para nada hay alusión a los planteamientos leninistas del control obrero que constituyeron fundamento de la etapa soviética inicial pre-estalinista.

-Descentralización-separación empresarial y estado.-

Este aspecto, positivo para el actual desempeño de la economía nacional, sin embargo, no puede verse fuera del contexto de los anteriores comentarios.

Al menos se plantea en 11 lineamientos (6,7,11,15,16,19,23,31,32,35,36), en los que se abordan la separación de funciones estatales y de las empresas (no queda claro dónde y cómo esto se produciría y es fundamental para entender la idea), la decisión por las empresas de inversiones y capital de trabajo, la creación de fondos de estimulación y desarrollo de los trabajadores, aprobación de las plantillas de cargos según plan-, la cooperación entre empresas, la flexibilidad de sus objetos sociales, condiciones para el paso a autofinanciamiento en algunas, los CAM con función estatal no empresarial lo que no ocurre ahora por norma-.

-Autonomía local.-

Este tema se enfatiza en el lineamiento 167 al menos, quedando pendiente de una profundización de hasta donde esta autonomía local será monitoreada y se reduzca al plano financiero, o constituirá un factor más amplio de movilización local, comunitaria y poblacional.

2DA. PARTE

-Planificación socialista.-

Con relación a este punto no trascendemos una posición de capitalismo de estado que también puede ser planificado. Resulta positivo que se establezca un vínculo legítimo entre planificación y mercado, nuevos métodos de planificación que abarcan lo territorial, estatal, empresas mixtas, etc. y que la facultad de aprobación se distribuya entre OACE, empresas y CAM. La cuestión esencial es que se obvia una planificación democrática con participación amplia de la población y los trabajadores. Punto crítico que limitará el sentido de pertenencia social y de efectividad y coherencia misma del modelo socialista.

-Fuentes de empleo.-

Este es otro punto esencial en las condiciones actuales. Se ha enfatizado el cuentapropismo como una de las vía fundamentales para el reordenamiento de la fuerza de trabajo. Aunque esta es una opción positiva desde el punto de vista de la autonomización de las personas y sus ingresos y la descarga del Estado de muchas actividades secundarias, el punto débil es que no se aprecia lo mismo con formas más socializadas como las cooperativas a pesar de su mayor reconocimiento actual- y otras formas de autogestión social.

Se pueden considerar como promoción de otras fuentes de empleo, además de la diversificación de las formas de propiedad, otras a determinar en la práctica, al menos, por los lineamientos 96 y 97 referidos al capital e inversión extranjeros-; el 106 sobre el financiamiento internacional a producciones necesarias, el 260 que aplica a la ampliación de las formas de turismo salvedad echa del posible inconveniente ecológico de los campos de golf, que requieren cantidades de agua insostenibles y no han sido brindadas las informaciones y estudios a la población-, el 264 sobre iniciativas locales de turismo y otras ramas como transporte y construcción -269,270,271) que se plantean con incrementos de trabajadores.

Aunque la autonomía local plantearía las posibilidades de industrias locales, cooperativas en diferentes sectores, etc., no se aprecia que se disponga su enfoque intensivo para resolver las necesidades de empleo y remuneración de la comunidad y localidad, lo que podría constituir una gran potencialidad.

-Política de precios e ingresos.-

Un punto crucial que se emparenta con la doble moneda y las deterioriadas condiciones de compra e ingreso actual de la población y tiene relación con el anterior refiere, al menos, 8 lineamientos. Algunos francamente con la apariencia de ilusorios, que quedan para definiciones posibles y posteriores. Así, el 66 declara la necesidad de establecer políticas, el 70 a la eliminación de la diferencia de precios injustificadas (cuando la tendencia visible es que en el mercado nacional y de divisas los precios aumentan inconteniblemente, sobre todo en este último), el 170 a que los ingresos correspondan a satisfacción de las necesidades casi apunta al delirio en las condiciones actuales-, (309) sobre la promoción de ventas de artículos de primera necesidad. Otros son tan cuidadosos como poco estimulantes para gran parte de la masa trabajadora: el 171 sobre el incremento gradual de salarios en los sectores de mayor aporte económico y social para lo cual la economía tiene que alcanzar un grado de mayor suficiencia que costará mucho trabajo, reenfoques y retos.

Por otra parte, lineamientos como el 282 y el 310 referidos a la revisión de los artículos de la canasta normada reducida casi a la nada actualmente- y al aumento de tarifas de servicios públicos, con el 69 referido a la eliminación de gratuidades indebidas, tensan extraordinariamente el ya bajísimo poder adquisitivo de la población. No se menciona para nada las gratuidades indebidas por privilegios extras otorgados a diferentes círculos de funcionarios de manera legitimada pero onerosa.

Aunque se puede rescatar la promesa de que los cambios de la libreta de abastecimiento, del voluminoso reordenamiento de plantillas, etc., serán más graduales y deben basarse en la creación de condiciones económicas que permitan asumirlos, no parece que esto vaya a esperar a esa primera condición; incluso, la cuestión de que no se quedará nadie desamparado, como garantía oficial, está considerando otras formas de empleo que, al momento, no tienen la suficiente fuerza para suplir adecuadamente los actuales, o bien que se hagan compensaciones a la manera de las jubilaciones cuyo monto no alcanza ni para sobrevivir, realmente-, con lo que esto pone en solfa las intenciones propuestas.

-Papel de las Ciencias.-

Se reconformó esencialmente este acápite de los Lineamientos y fue uno de los más cuestionados en el sector, añadiéndose la necesidad de una política integral al respecto (129), el papel de las tecnologías sociales y educativas (131), el desarrollo de la investigación social y humanística y los métodos de introducción de resultados en la toma de decisiones del país (137), entre otros importantes, que de todas maneras requerirán de una atención especial y sostenida para que, en esos campos y en otras, las ciencias y, en específico las sociales y humanas, lleguen a tener el impacto al que aspiran.

3RA. PARTE

Muchos puntos clave de los aspectos tratados tienen que ver con lo que se anunció para la Conferencia del Partido que debería ser un asunto aún de más profundo debate real para toda la nación-: la visión de sociedad futura, las relaciones entre Partido y Estado, las relaciones y funciones del Partido y las organizaciones de masas, etc.

Cabría referir, a modo de anticipación, que esa visión de sociedad socialista futura está ya marcada, fuertemente, con trazos de avance pero también de limitaciones importantes, en los actuales Lineamientos aprobados. De manera que no se trata sólo de sus formas de implementación, sino de su corrección progresiva para que cada vez, respondan más a los objetivos que se proyecten, de un estado socialista con profunda democracia de los trabajadores y el pueblo.

La relación Partido-Estado, cabría agregar, no sólo habría que analizarla en las bases y organismos, sino también la necesaria separación a nivel de toda la dirección de la sociedad. Hay que tener en cuenta que en el sistema eleccionario actual también requerido de cambios profundos, tanto como nuestra Constitución Socialista- el Gobierno, a todos los niveles y, de acuerdo a los mecanismos establecidos que también requieren ajustes y cambios importantes- es elegido por el Soberano el pueblo, según la propia Constitución-.

Por tanto, también se impone una nueva interpretación del artículo 5, más diáfana y acorde con los tiempos, acerca del papel dirigente del Partido en toda la sociedad, sobre todo teniendo en cuenta que el Partido no rinde cuentas al pueblo ni sus dirigentes son electos por este. Otras funciones ideológicas, de orientación política, etc., que le son propias, deberían ser también no sólo precisadas, sino adecuadas en sus prácticas actuales.

Esto, en mi modesta opinión, debería ser parte de los Lineamientos de la Política, que habría que acometer en términos más tempranos que tarde, para lograr un acople orgánico y coherente de los Lineamientos y un funcionamiento integral de nuestra sociedad hacia objetivos socialistas consensuados con todos.