Ante la crisis, sembrar esperanzas: 2012 – 2013

Por Félix Sautié Mederos.

Crónicas cubanas

Ya termina el año 2012 y comienza el 2013 en medio de múltiples hastíos y desesperanzas. En estos tiempos, percibo que entre la población ha incrementado una actitud dirigida a desentenderse de los grandes problemas que tenemos por delante en Cuba y en el mundo, para concentrarse en lo cotidiano que, al menos, le permita sobrevivir frente a las dificultades, las prohibiciones absurdas que se mantienen incólumes, los esquemas burocráticos, las inconsecuencias y cualquier otra controvertida incidencia.

Me refiero a una tendencia que quizás no se haya percibido ni tenido muy en cuenta por muchos, que se ha hecho más visible desde hace algunos años. Pienso que su cabal comprensión, requiere vivirla desde muy adentro. La determina, en mi criterio, el instinto de conservación dirigido a “resolver” ante todo las necesidades económicas del día a día. Creo que es importante tomarla muy en consideración.

Los seres humanos, en primera instancia, necesitan vivir; y quizás algunos desde las seguridades externas en que se desenvuelven, no les sea posible comprender las inseguridades con que sobreviven los que están dentro del vórtice geográfico de los problemas que nos aquejan a los cubanos hoy. Aquello que expresó Marx y que parafraseó, cuando planteó que antes de pensar en política se pensó en comer, materializa como nunca antes su vigencia. Terminamos pues, el presente año y comenzamos el 2013 en medio de dilemas humanos muy complicados que de no comprenderlos y afrontarlos con misericordia y benevolencia, podrían dañar sensiblemente a la Nación cubana. Para enfrentarlos, pienso que es decisivo el amor al prójimo, la reconciliación y la siembra de esperanzas que, además, deberían ser una parte esencial de los caminos que nos conduzcan hacia el futuro.

También he podido observar que incipientemente, desde muy adentro de la realidad cubana durante el año 2012, algo distinto ha estado en movimiento dentro de un “más de lo mismo” cuajado de consignas, esquemas y lemas; muy a pesar de las actitudes públicas de algunas personas en las instancias políticas y administrativas tan conservadoras que con su sola presencia, “enfrían” cualquier manifestación de optimismo hacia los cambios necesarios. Considero que por mucho que se trate de entorpecer estos cambios y que se apliquen sucedáneos de fuerza, ya no podrán ser detenidos. Pienso, además, que en contraposición con el discurso y las acciones de quienes han optado por una actitud conservadora unida al uso de la fuerza para intentar acallar las conciencias, sin cambios efectivos se habrán de exacerbar las situaciones inaguantables y todo podría conducirnos hacia un callejón sin salida.
Es mi criterio que en estos momentos nos exponemos a un inminente peligro que por acumulación se ha acelerado, incluso como efecto secundario de la resistencia que hace la burocracia política y administrativa a la implementación de las medidas previstas por el VI Congreso del PCC que, con una mezcla contradictoria de posibles soluciones, retrocesos y abigarramientos, intentan cambiar la crítica situación existente. En este orden de pensamiento, coincido con las insistencias planteadas en varias intervenciones suyas por el Presidente Raúl Castro, en relación a que estamos bordeando el precipicio, que es necesario un cambio de mentalidad, que hay que eliminar las trabas y que “urge romper el bloqueo que todavía persiste a la hora de seleccionar y preparar a los jóvenes dirigentes” entre otra más, que no deberían quedar sólo como palabras al viento o propósitos inalcanzables, porque nos enfrentamos a una situación verdaderamente crítica.

En este sentido, debo añadir que los intentos de acallar mediante la descalificación y la compulsión que incluye el uso de la fuerza a las críticas y las expresiones del pensamiento diferente, nada bueno nos reservarán para el 2013 que ya nos llega. Quizás por una vez en la vida, deberían escuchar lo que estamos planteando al respecto desde los ámbitos de la nueva izquierda, del socialismo participativo y democrático, así como desde las diversas posiciones políticas y sociales que, constructivamente, nos manifestamos sobre la necesidad impostergable de un cambio radical porque realmente ya no queda mucho tiempo.

En todo este tiempo transcurrido, se ha intensificado una explosión de espiritualidad y religiosidad cuyos límites máximos se pueden apreciar en el 2012, que algunos en sus análisis desde el exterior no alcanzan a percibir porque la espiritualidad, en última instancia, debe medirse desde muy adentro de una población que incluso ya antes de la visita de Juan Pablo II, cansada de tanto ateísmo que le vació sus vidas, buscó la esperanza, el consuelo y la paz espiritual en los templos católicos y protestantes, cuyas feligresías han ido incrementado en una tendencia cada vez más creciente, así como en los cultos sincréticos y en la extendida religiosidad popular. Los que identifican a las iglesias sólo con sus jerarquías, no interpretan los sentimientos religiosos de un pueblo que se ha volcado tras los recorridos de las diversas procesiones de la Virgen de la Caridad por todo el país, así como en las visitas de Juan Pablo II primero en 1998 y de Benedicto XVI en abril del 2012. Quienes no han vivido en Cuba desde hace años y no han estado presentes en este resurgir de la religión en nuestro país, pueden afirmar enfáticamente que “La Iglesia Católica ha adquirido más importancia en la isla por razones exclusivamente políticas” (1).

En los análisis de las ciencias sociales, esas manifestaciones enfáticas generalmente resultan ser erróneas porque, en este caso, aunque es cierto que la política ha jugado un papel importante en el renacimiento de la Iglesia Católica, también y muy principalmente, lo han sido el sensible incremento de la población en las manifestaciones públicas de fe y el innegable aumento de la asistencia a las misas en las que participo dominicalmente y a los cultos religiosos en general. Así lo pienso y así lo afirmo con mis respetos para el pensamiento diferente, con mis deseos de mucha paz, amor y felicidad para todos en el 2013. fsautie

(1) Samuel Farber, Revista Nueva Sociedad No. 2 noviembre diciembre 2012 http://www.nuso.org/

Publicado en Por Esto! el lunes 31 de diciembre del 2012.

http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=22&idTitulo=214439

Nota: los invito a visitar mi página WEB http://www.cuba-spd.com/#

0 thoughts on “Ante la crisis, sembrar esperanzas: 2012 – 2013

  1. Muy estimados amigos, disculpen la tardanza en responderle porque no tenía tiempo disponible en la red, ante todo quiero reiterarles a todos sin excepción alguna mis mejores deseos para el año que comienza y agradecerles muy especialmente el interés que demuestran por este artículo que pensé mucho para hacerlo y que debido al espacio de que dispongo en Por Esto! en donde publico regularmente (2 cuartillas en Arial 12 tamaño carta) tuve que hacer uso de una “síntesis muy sintética” que dejaron a algunas de mis expresiones que no quise quitar por su importancia en un estado verdaderamente críptico, pero pienso que en el conjunto pueden entenderse y en el debate quedar mejor definidas.

    Claro está que todos no podemos estar de acuerdo en todo, y que ninguno de nosotros es dueño de la verdad absoluta, si eso sucediera podría deberse a un empobrecimiento del pensamiento que es lo peor que pudiera pasarnos. En consecuencia el diálogo de todos con todos sin excepciones onerosas, en el que no participen solo los que no quieran hacerlo o no tengan nada que decir, es fundamental. Por lo que les estoy muy reconocido a quienes han opinado en este trabajo, aunque no estemos de acuerdo en algunas cuestiones planteadas, lo importante es la disposición de dialogar con respeto por el pensamiento del otro: Ese en mi opinión es un camino muy importante ante los problemas que afrontamos los cubanos, tanto los que estamos adentro como los que están en el exterior.

    Quiero dejar claro que mi visión de los asuntos que trato es de una alerta sobre la importancia que tiene “sembrar esperanzas”; que de conjunto no son los únicos problemas concernientes al 2012 dado el espacio con que cuento; son para mi quizás un conjunto seccionado entre los más significativos.

    Mi experiencia en los procesos de la religión, está avalada en primer lugar por mi vida dentro de las organizaciones religiosas antes y después de 1959, además de 10 años de ejercicio de la docencia en un instituto ecuménico de formación de laicos que fue disuelto pero por el que pasaron algunos miles de jóvenes y personas adultas de distintas comunidades y zonas incluyendo a no cristianos que se acercaron para conocer a los otros, tales como musulmanes, bahai y de la religiosidad popular. Todos con el propósito de formarse en los estudios bíblicos y teológicos , fue una experiencia muy importante y hermosa. He visitado múltiples comunidades y he trabajado en el movimiento macroecuménico en estudios y encuentros de análisis. Participé en la elaboración de un libro en colectivo de autores publicado por la Editorial Nueva Utopía de Madrid, 2001 con el título “FUTURO DEL SOCIALISMO Y LA RELIGIÓN CRISTIANA EN CUBA” ; tengo varios libros míos de análisis al respecto: Sin tiempo para Morir, Nueva Utopía Madrid 1999, Evangelio y Revolución, Nueva Utopía Madrid, 2000; Cuba Problemas y Retos Nueva utopía Madrid, 2000; Palabras de Esperanzas Nueva Utopía de Madrid,2005 y actualmente publico por entregas en semanas alternas en el Semanario dominical de Por Esto!, Unicornio con el título LA ESPIRITUALIDAD PROHIBIDA mis testimonios y experiencias al respecto de estos temas.

    Además he estado presente personalmente en los momentos tan complejo como La última Concentración Nacional de la Juventudes de Acción Católica que fue la IX, en el año 1954 celebrada en Sgo. de Cuba, posteriormente en el Congreso Católico Nacional de 1960, en la última procesión de la Caridad del Cobre en La Habana en los años 60 , así como en las primeras en preparación y posterior de la visita de Juan Pablo II, en las visitas de ambos papas y en múltiples encuentros de estudio y análisis del problema religiosos en Cuba. Incluyendo mi actual participación como feligrés y/o como periodista en las actividades de estos años. Durante muchos años he participado en la proclamación de la letra del año y tengo muy buenas relaciones personales con algunos prominentes babalawos con quienes hablo, dialogo y he participado en sus actividades, Tengo ex alumnos de diversas manifestaciones religiosas. Es de toda estas experiencias de las que saco mis afirmaciones al respecto en este artículo sobre el resurgimiento de la Religión y la religiosidad. Puedo afirmarlo desde muy adentro.

    El problema en este sentido es que la realidad es la que es y no lo que queramos o pensamos que sea. Respeto a los criterios de los que me han dicho que no están de acuerdo con mis afirmaciones al respecto de este tema en el artículo SEMBRAR ESPERANZAS, pero desde afuera del problema no me van a convencer porque yo lo estoy viviendo y lo veo con ojos de analista participante. Esa es la cuestión.

    Continuaré dialogando. Mis saludos a todos.

  2. Amigo Félix:
    En primer lugar deseo expresarle a usted mis más sinceros votos porque el próximo año 2013 sea de paz y esperanza para usted y todos mis compatriotas. Son los deseos sinceros de un creyente no practicante.
    Hablar sobre Cuba cuando no se está en el vórtice de la tormenta puede resultarle a los que viven una realidad agobiante como superficial o inexacta. Por el contrario creo que todos los puntos de vista son válidos y necesarios. El país vive una situación de crisis que se ha prolongado por más de 20 años. Lo que comenzó por la peor crisis económica de nuestra historia ha terminado teniendo implicaciones sociales y políticas que requieren ser estudiadas con mucha más profundidad y objetividad si de buscar soluciones realistas se trata al dilema nacional presente. Sin dudas esto no se va a dar si primero no hay un cambio de mentalidad de la nación, cambio que signifique asumirnos como ciudadanos libres, dueños de nuestra propia existencia y dotados de autonomía para tomar decisiones.
    ¿Cuántas personas deben cambiar de mentalidad para lograr la irreversibilidad del proceso? ¿Es necesaria una masa crítica? Este es un tema que ha sido estudiado por expertos con relación al cambio de mentalidad necesario para evitar la extinción de la especie humana ante el impacto negativo del cambio climático. Se calcula que se requiere una masa crítica equivalente a la raíz cuadrada del 1% de la población.
    ¿Quiénes deben cambiar de mentalidad en Cuba? En realidad no importa quienes sean pero hablando en términos de probabilidades son los jóvenes con formación profesional, académica y posiciones de poder en los que sería esperar primero dicho cambio de mentalidad.
    No le niego que soy optimista sin que por ello no tenga en cuenta que hay fuerzas poderosas en el aparato estatal y partidista que están defendiendo sus intereses a como dé lugar y utilizando todos los recursos de que disponen. El tempo es aquí también un factor importante, mientras más se prolongue la situación actual mayor es la probabilidad de un estallido social que la mayoría de la nación no desea.
    Mi último comentario se refiere a la mayor participación de los cubanos en cultos religiosos:
    ¿Significa ello un aumento de la religiosidad y espiritualidad del pueblo o es solo expresión de una mayor influencia del pensamiento mágico en respuesta a la angustia cotidiana?

    • Sr Zayas:
      La irreversibilidad de que proceso desea usted asegurar? La del que ha desembocado en una crísis permanente, que en su fase más aguda dura 20 años?
      en el que los cubanos no se sientes como “ciudadanos libres, dueños de nuestra propia existencia y dotados de autonomía para tomar decisiones” ?

      No sé si se necesita una masa crítica para tal cosa, pero si sé lo que se necesita para que usted deje de pensar en las musarañas

    • Lo que no te cuento a tí entre los que deben primero cambiar de mentalidad, sería mucho pedir.

    • Desde luego, Manuel. Seria mucho que usted se atreviese pedirme csmbiar. Seguire viendole evolucionar en su forma de pensar. No se preocupe; asumo la responsabilidad de señalarle cuando esta hablando catibias

  3. Estimado Félix,
    Primeramente mis mejores votos para usted en el 2013.
    Me asalta la duda de sí estamos pensando en lo mismo cuando usted dice que no queda tiempo, que se nos acaba el tiempo y yo le pregunto: ¿no queda tiempo para qué? ¿Qué es eso tan terrible que avisora y que nos amenaza? ¿Una chispa que suelte las amarras de una explosión social y termine en una guerra civil? O la implosión natural de una revolución que desgastada no da más de sí? ¿O quizás nos alerta usted acerca de la avanzada edad de los que tienen el timón de este barco que va directo a encallares en los arrecifes sin haber preparado un relevo?
    Cualquiera que sea esa cosa tremenda que usted nos alerta no es buena. Yo no veo razones para optimismo, aunque viva fuera voy a la isla seguido a visitar a mi familia. Quizás es como en el dominó que quien está fuera ve lo que no ve el que está dentro
    Como usted yo también veo en el 2013 más nubarrones que sol (el gallego sigue viviendo en el mundo de Yupi). Esperemos pues a ver qué pasa, pero algo si es cierto. Mientras Cuba se resiste a hacer cambios para echar a andar su vieja máquina oxidada, el mundo sigue rodando cada vez más veloz. La distancia es cada vez más grande. El tiempo perdido no se recupera.
    Discrepo con usted en que haya un crecimiento de la religiosidad. En buen cubano: la gente se acuerda de Santa Bárbara cuando truena. En la primera mitad de los noventa los templos se llenaron también, la gente cogía la mao de Orula o se rayaba buscando solución a sus problemas o bien la bendición de un viaje a USA a través de la iglesia, o la bendición dél padrino a la balsa que los habría de llevar sanos y salvos a tierras de Estados Unidos. Pero una vez que el agua bajó un poco, los templos se vaciaron y los altares se llenaron de polvo.
    Cuba nunca ha sido un pueblo religioso como lo es el resto de Latinoamérica o incluso España. No es culpa de la revolución, los cubanos creemos en Dios y Changó al mismo tiempo… cuando tenemos problemas.

  4. @Señor Sautié
    Me gustaría dar mi opinión sobre el texto, pasadas las siete meridiano, como creo que se diría en Cuba, de este último día del año, no tengo el tiempo suficiente. Creo estar de acuerdo con casi todo lo que dice, pero a pesar de todos los pesares, “lo que tenga que pasar, pasará”. Ni los falsos profetas abanderados de los “derechos humanos”, pero pasados por el beneplácito de los chicos altos, rubios y que mascan goma se van a comer un rosco, porque son falsos, ni las dificultades que puedan encontrar “los cambios”, se van a solucionar en dos días. Todo es un proceso que caerá como fruta madura cuando tenga que caer. Mientras es cierto que lo que más preocupa es lo inmediato, pero ya surgen “nuevas preocupaciones” y lo que creo entender, es que están surgiendo nuevos modos de analizar, sacar consecuencias, mostrar divergencias o disconformidades y exigir. Han sido pocos los casos de personas propuestas a delegados provinciales y a diputados que las asambleas correspondientes han rechazado y han accedido los reservas. Pero se han dado. Si no me equivoco, un total de 30 casos. Son pocos, pero están ahí. Es un ejemplo.
    Un familiar acaba de regresar de la isla y ya había estado sesi veces antes. Esta vez, como cosa llamativa, muy llamativa, me dice que ha sido ver la enorme expectativa de lo que pasará el día 14 con la nueva regulación en materia de migración. Dice, ¡todo el mundo habla de lo mismo¡
    Pues bien, tengo la impresión, a 11 horas de vuelo, que están cambiando las cosas en la isla.
    Veo unos videos sobre elecciones y surge la pregunta: ¿Va a cambiar la ley electoral? Respuesta que ha de entenderse: ¡Sí¡
    Realmente lo que quería era desearle una buena entrada de Año y mis mejores deseos para 2013.