Por Daisy Valera
HAVANA TIMES — “Unidos por un socialismo próspero y sustentable” es el lema con que convoca la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) a este primero de mayo. Sin dudas una consigna más optimista que aquellas del tipo: ¡A trabajar duro!
Llena la primera plana de varios periódicos y de paso nos exhorta a que participemos en la materialización de los lineamientos del Partido Comunista de Cuba (PCC).
¿Podríamos esperar otra actitud de la CTC?
Sería ingenuo, en las últimas cinco décadas la Central ha engordado una lista poco feliz de deslealtades que incluyen la ilegalización de otros sindicatos;) la creación del policiaco expediente laboral, la supresión del derecho a huelga; y recientemente el apoyo a una Ley de Seguridad Social (2008) que adicionó cinco años a la edad de retiro.
En poco más de 13 meses la CTC ha cambiado su discurso.
En el 2012, con la ola de despidos basada en la “idoneidad demostrada” y apoyada por este organismo, el llamado que se hizo a los trabajadores fue a participar y a discutir los planes laborales y el presupuesto.
En estos momentos, posiblemente gracias a la actitud pasiva demostrada frente al desempleo, el máximo sindicato del país opta por mantener desempoderados a sus afiliados en lugar de promover la incorporación de estos a la toma de decisiones en sus colectivos, para corroborarlo están palabras de Carmen Rosa López: “Ha quedado claro que los trabajadores no aprueban el plan, sino que contribuyen con su labor al cumplimiento”.
Y las declaraciones de la nueva líder de la CTC, no quedan allí, aprovecha para resaltar la actitud de los dirigentes administrativos y esclarece que la función del movimiento sindical es movilizar a los trabajadores en las principales tareas del país.
Un discurso que despeja cualquier duda sobre la posible participación y protagonismo del trabajador cubano en la llamada actualización del socialismo.
Se han cansado de usar máscaras, nos acercan a una imagen más real de la única organización que legalmente puede representar a la fuerza laboral de la isla; una que está a medio camino entre una caja de cotización y un teatro de marionetas donde la administración controla todos los hilos.
Qué hacer entonces ante tanto problema visceral olvidado: índices de desempleo en aumento, subempleo y salarios simbólicos. Qué hacer para evitar una muy posible explotación de la mano de obra cubana, esta vez por las trasnacionales a las que el Estado abrirá las puertas.
La CTC escoge bando, los trabajadores no están en él. Pertenecer a sus filas solo sirve para acreditarla a nivel internacional.
Ahora solo queda establecer nuevos mecanismos de información y comunicación tanto entre los que laboran para el Estado como entre los cuentapropistas; nuevas uniones capaces de luchar por reivindicaciones en lugar de bajar la cabeza, pactar y obedecer.
Pingback: Para agotar(me) temporalmente en este tema de la organización obrera | Red Observatorio Crítico
– No pienso que los errores de la teoría marxista se reduzca a “hombres equivocados” ¿Eso entendiste de mi expresión? si fue así, te digo, a las claras, que la crítica a la teoría marxista en mi criterio debe ir (y ha ido) mucho más allá de eso. Pero, a fin de cuentas… yo mencioné marxismo aquí? estábamos hablando de marxismo?
– No sé esa izquierda que tú dices… yo si reconozco un dilema (que por cierto, ni siquiera intentaste resolver): sigo con hambre
– Yo voto por todos los derechos. Pero todos de verdad.
– No sé cómo decir que “Mi punto no es la negación de tales instrumentos, sino señalar sus insuficiencias estructurales”, puede ser leído como que los “escupo”.
– Si nosotros no somos los que contamos… entonces qué haces por acá? (no hard feelings). Creo que sí contamos un poquito, y tu presencia aquí lo demuestra.
Yo ni creo que el problema sea de las figuras, ni que el fondo sea una buena idea. Yo lo que pienso… bueno… tendrás que ir leyéndome poco a poco cada día.
– Yo no niego la realidad… la vivo.
saludos
Isbel:
No se trata de lo que tu hayas dicho, porque … lo que has dicho es NADA
En respuesta a yo_yo
Ya lo has dicho. Si hasta en Haití, con derecho a huelga y todo, no pueden solucionar sus problemas… ¿entonces dónde está el beneficio?
Por cierto, no acabas de corregir tu error de percepción sobre lo que tenemos en Cuba… es decir, eso que tú y algunos acá intentan convencernos de que es socialismo
Cuando te comento que eso es una falacia argumental, porque los problemas de Haití no están relacionados (no todos, y no los que señalas) con conflictos laborales, ergo, la crítica al derecho a huelga está fuera de lugar, mientras que el comentario de yo_yo se ajusta al tema del post y está al menos lógicamente relacionado con el mismo, sales con esto:
[no me trago] las falacias de las democracias burguesas
¿que se supone que significa eso?
Me muero de hambre, me explotan… pero soy feliz porque tengo derecho ha fundar un partido… (aunque no lo funde) jejejeje. Lo del partido no está mal, pero ¿ha logrado que deje de pasar hambre?
A ver si lo entiendo : el “capitalismo” es el culpable de ese “hambre”, mientras que la “democracia burguesa” [tiene] insuficiencias estructurales.. Es dec3epcionante tener que actuar de adivino de las intenciones de personas, acostumbradas a ocultar sus pensamientos e incapaces ya de expresar de manera directa lo que desean. Así que esperaré a ver si mi “interpretación” es correcta
Luego afirmas:
Si quieres seguir llamando a X por el nombre que le da el poder, me parece genial. Yo, por mi parte, prefiero empoderarme también desde el lenguaje (una de las herramientas culturales más poderosas!!!)
ante lo cual solo queda sonreir : la élite gobernante castrista llama socialismo al sistema imperante en nuestro país. Todo el andamiaje ideológico, propagandístico y cultural que lo sustenta se basa en esa premisa (el estado de obreros y campesinos, blablabla, el partido de vanguardia, blablabla) … ¿y tú pretendes que ignoremos esa realidad y aceptemos tu actitud de chiquillo asustado ante la fealdad de la utopía, que cierra los ojos e intenta auto convencerse de “esto no es socialismo esto no es socialismo”?
Pues menudo emponderamiento cultural que logras, oye!
Y ya fuera de coña, mi presencia en el blog solo significa que mi interesa lo que escriben, por supuesto. Siempre es mejor que el inmovilismo de los fanes del sistema “esta es la mejor de las sociedades, es perfecta y cualquier tiempo pasado fue peor”.
El dilema no existe, por tanto no hay nada que resolver. Existe el hambre, y la solución al mismo, como demuestran los experimentos que tú te empeñas en no llamar “socialismo”, no consiste en el totalitarismo feudalizante en que inevitablemente deriva la estructura de la sociedad que exige vuestra atribulada alma, sedienta de utopías. Ninguna de vuestras utopías ha contribuido en grado alguno a disminuir ese hambre, mientras que la avaricia de los mercados si lo ha hecho. Las estadísticas lo demuestran. Aunque a los profetas del fin del mundo mirado desde un estómago particular no lo vean.
Maha: Si llamas ser “trascendentalista” a no tragarse las falacias de las democracias burguesas… pues soy trascendentalista.
Además, el debate sobre las prioridades entre los derechos de 1ra, 2da y hasta tercera generación, ya es tan viejo…
Me muero de hambre, me explotan… pero soy feliz porque tengo derecho ha fundar un partido… (aunque no lo funde) jejejeje. Lo del partido no está mal, pero ¿ha logrado que deje de pasar hambre? Mi punto no es la negación de tales instrumentos, sino señalar sus insuficiencias estructurales.
Si quieres seguir llamando a X por el nombre que le da el poder, me parece genial. Yo, por mi parte, prefiero empoderarme también desde el lenguaje (una de las herramientas culturales más poderosas!!!)
Saludos
Isbel:
Como no sé a qué llamas “falacias de la democracia burguesa”, pues poco que comentar
Lo de ‘trascendente’ se refería a los intentos de pasar de puntillas sobe la historia de los fracasos en la implementación de la teoría marxista, despachandolos con un breve (y falso) “el problema es que que se cometieron errores y/o lo ejecutaron los hombres equivocados”. Puede que el debate sobre prioridades en los derechos de 1ra y 2da sea viejo …. el problema es que la izquierda (incluso aquella que se autodenomina, de manera incomprensible, como “alternativa”) sigue anclado en su incapacidad para comprender que no existe dilema alguno. Que renunciar a cualquiera de los derechos es la forma más sencilla de perderlos todos. Me refiero por supuesto a ese “pueblo” en cuyo nombre siempre discursean desde tribunas y foros los intelectualoides (no hard feelings) de “la alternativa a la democracia ‘burguesa'”. Para los iluminados del “parido” de turno por supuesto que la renuncia a confrontar sus ideas con las del resto de la sociedad es beneficiosa.
El poder señalar los defectos estructurales (e intentar corregirlos, añadiría yo) es EL MECANISMO. Esa pequeña alegría que te otorga la democracia liberal, y a la cual escupes sin saber lo que haces.
Tengo que llamarle al sistema instaurado en nuestro país tal como le llama la élite que lo gobierna porque ellos cuentan. Ustedes, los que creen que es un problema de figuras, pero que en el fondo, la idea es buena, no. Ergo, ¿para que tener en cuenta vuestros malabarismos conceptuales? ¿Crees que negando la realidad te “emponderas” de algo?
Saludos
iluminados del “partido” de turno
isbel aqui donde vivo las huelgas ( que casi siempre se acaban antes que comiencen) si dan resultados, en mi empresa no se llegaba a un acuerdo con el sindicato sobre los proximos 3 años de incremento salarial, entonces el sindicato llamo a la huelga y gracias a que ambas partes cedieron en algunos puntos todo se aclaro y por fin la huelga no se llevo a cabo. En el sector de la construccion paso lo mismo y asi en todas, la cuestion es que cada parte prueba fuerza la diferencia con Cuba es que hay una sola parte.
ah, y por si se te ocurre… yo no quiero el mal menor… yo quiero el bien.
parafraseando
Era parte de aquella fuerza que desea el bien, y siempre acaba haciendo el mal (c)
Yoyo: Ya lo has dicho. Si hasta en Haití, con derecho a huelga y todo, no pueden solucionar sus problemas… ¿entonces dónde está el beneficio? Por cierto, no acabas de corregir tu error de percepción sobre lo que tenemos en Cuba… es decir, eso que tú y algunos acá intentan convencernos de que es socialismo. Pero bueno… queda claro que no es de tu interés actualizar tus conceptos.
100 % Gusan@: Que sea MENOS malo en algunos aspectos, no significa que NO sea malo.
Isbel:
¿Apelamos a falacias lógicas?
– Los problemas de Haití no los puede solucionar el derecho a huelgas porque los problemas de Haití no son conflictos laborales entre patrones y empleados.
– En los sitios donde se producen conflictos laborales en Haití, los trabajadores haitianos tienen más posibilidades de defender sus intereses que los cubanos en la situación descrita en el post. Ergo, el comentario de yo_yo no queda refutado por tu tergiversación.
– Llámalo equis , como diría Sabina; ¿que no te gusta la palabra “socialismo” aplicada a loqueseaqueeselcastrtsmo? Pues ponle otro nombre : por lo pronto, seguiremos usando la autodenominación que le da el grupo en el poder en nuestro país. Aunque nos pongamos luego trascendentes y empecemos a desbarrar sobre la “desviación de la teoría”, y “luchemos por una verdadera implementación” (*)
(*) btw, sigo sin comprender como no sois capaces de asimilar que no existe tal desviación. Lo que tenemos es el resultado de aplicar cualesquiera sean las recetas que los zurdos idean para imponer su visión del mundo. Que ahora nuestra élite política esté desmantelando hasta los últimos vestigios reales, dejando solo la palabrería para encubrir su acelerada trransformación en “burguesía gobernante pro decreto” no quita que el sistema existente (o que existió) es el único posible resultado de la “teroretización” sobre el “derecho inaleanable de los obreros a ser dueños de los medios de producción”. Esperando a ver cuando el “alter izquierdismo” se quita la careta y se declara “Único Partido Representante de Los Obreros Y por Ende, Vanguardia de la Humanidad”
Excelente reflexión, Daisy. Por cierto, acaban de aprobar nuevos reglamentos para las empresas que funcionarán en las maquilas cubanas del Mariel, pero nada se dice de la protección laboral a los obreros allí empleados… que estarán aún más expuestos a los mecanismos de explotación del mercado mundial.
Isbel,
La culpa es del socialismo. Si Cuba fuese capitalista, tendrían los trabajadores derecho a la huelga. Hasta en Haití los obreros pueden protestar, asociarse y salir a la huelga por mejores salarios… pero no hay peor ciego que el que no quiere ver
Isbel, tenlo por seguro, que más protección que en Cuba tienen en muchos otros países del capitalismo malomalísimo.
En este mismo tercer mundo, ayer escuché que están recibiendo unas 300 renuncias diarias, tienen prohibido el pago a destajo: si el negocio no te da lo cierras pero no le puedes trasladar las pérdidas al empleado. Aparte de las vacaciones tienen el llamado XIII mes, que es otro mes de salario dividido en tres partes que recibes en diciembre, abril y agosto.
Los empresarios se quejan, de que la mayoría de los litigios laborales se resuelven a favor del trabajador.