Cuba: apuntes “paranoides” sobre el ¿Caso Zurbano?

Por Manuel David Orrio (orrio@enet.cu)

La Habana, 13/04/17.-Acuso recibo por correo electrónico de un artículo al parecer aún inédito de Alberto Abreu, quien bajo el título ¿Puede ser negra la nación? ofrece su aporte al debate sobre racialidad y racismo que tiene lugar en la revista cultural criolla La Jiribilla, nacido tras la destitución del escritor Roberto Zurbano como Director del Fondo Editorial de la Casa de las Américas. (1)

Según noticias, esa destitución se produjo a consecuencia de un artículo publicado por Zurbano en el New York Times, donde habría apuntado que para los negros cubanos, la Revolución de 1959 no ha comenzado. Inicio “con pinzas”, quede claro, porque sobran motivos periodísticos para lanzarse al ruedo en cuasi paranoia, como se verá más adelante.

Me enteré del hecho y de la polémica subsiguiente por mi viejo amigo Tomás González Robaina, autor de imprescindibles textos sobre lo que se ha dado en llamar la “negritud” en Cuba. He seguido el debate, muy de mi interés por razones patrióticas, políticas y personales. Dos parejas, mi anterior esposa y mi actual compañera, son negras. La actual es una reconocida psiquiatra cuya abundante familia rebosa de negros brillantes en lo humano e intelectual. SON MI FAMILIA. PUNTO.

A fuer de franco, yo, "blanquito habanero” criado en el Barrio de La Pera, y ahora un “asere” más del Barrio Chino, he sido toda mi vida de los que ni siquiera "ve" el color de la piel. Adquirí conciencia sobre este cubano racismo "difuso" cuando conocí a mi hoy ex – esposa negra (segunda en mis casorios; la madre de mi hijo, primera, es blanca), e incluso viví una suerte de doble discriminación, porque soy limitado físico por secuelas de poliomielitis. Hube de escuchar entonces frases como ésta:"¡Pero mira qué clase e ‘prieta’ se ha ‘buscao’ el ‘cojo e mierda’ éste; seguro que el tipo tiene un ‘baro’ que llega a Miami!" Era, en honor a la verdad, una de las muy bellas de La Habana de fines de los 90. E insisto: racismo “difuso”. Jamás en mi vida he constatado que la Revolución haya discriminado por el color de la piel de manera institucional, sino todo lo contrario.

No obstante, valga la anécdota para reflexionar sobre cómo conspiran distintas discriminaciones, y si tienen o no un origen común ¿Cuento más? A lo largo de años he sido un entregado activista por los derechos de las personas con discapacidad, incluso miembro del Consejo Provincial capitalino de la Asociación Cubana de Limitados Físicos Motores (ACLIFIM) y dirigente vanguardia a nivel provincial en el 2006.Pues bien, me he alejado de esas tareas, porque si hay un sector de Cuba donde peor me han tratado es entre los limitados físicos, y éso que tengo "status de héroe" por servicios prestados en la Seguridad del Estado, como agente encubierto que se infiltró exitosamente durante 11 años en la contrarrevolución (1992-2003).

Nada de sutilezas ni discriminaciones “difusas”: se llegó al colmo de decir que saboteaba un congreso, en pleno cónclave celebrado en el 2005, porque propuse y sostengo la necesidad de que Cuba tenga una Ley General de Discapacitados, para darle un nombre. Curiosidades, curiosidades: cuando el hecho aconteció estaba presente el entonces Presidente de la Asociación Nacional del Ciego (ANCI), quien captó la idea, la propuso en su correspondiente congreso y devino ésta primera noticia sobre ese cónclave en casi todos los medios de difusión nacionales (2) De paso, ya que aludí a mis años en la Contrainteligencia, ¡cuántos magníficos jefes negros y mulatos tuve!

Con mi actual compañera y su familia también he vivido o conocido manifestaciones discriminatorias por el color de la piel, las que han llegado al punto de negar una vez un empleo a mi cuñada, no obstante ser arquitecta reconocida y profesora universitaria. Ocurrió en los 90, pero pasó. Ella no tenía pruebas para llevar a los tribunales al discriminador…y quedó así, aunque aquel le dijo sin miramientos que reunía todos los requisitos pero "tu color no le va a gustar al inversionista extranjero".De todos modos, se la perdieron. Su modestia me prohibió mencionar uno de sus numerosos logros profesionales.

Uno de mis sobrinos políticos, José Luis Rubio Reyes, ganó este año el Concurso de Interpretación de Instrumentos de Cuerda de la UNEAC, con Evelio Tieles de Presidente del Jurado. Es violinista, tiene 17; ganó con piezas como "Aires Gitanos", considerada obra para graduarse en el Instituto Superior de Arte (ISA), y tiene programado un concierto con la Orquesta Sinfónica Nacional como parte del bien ganado premio. Todos en la familia hemos sido testigos de "serruchaderas de piso" contra el aguilucho, alguna que otra protagonizada por PROFESORES de José Luis. También, en honor a la verdad, podemos testificar sobre muchos que primero han valorado el talento y no el color de la piel…si es que se han fijado en éste.

Dije a mi gran amigo Tomás González Robaina que me siento poco autorizado en tanto que periodista para intervenir en el debate de marras. Jamás escribo sobre algo si no conozco a fondo, si no he investigado hasta la saciedad o, en su defecto, informo al lector hasta dónde avanzó mi conocimiento. Una máxima mía circula en Internet y ha sido citada por más de uno: "el periodista confirma, confirma y confirma".Más si en la discusión que me ocupa intervienen intelectuales conocedores de tan alto nivel, donde el mismo Zurbano — ¿objeto o pretexto de la polémica? — brilla con luz propia.

Sin embargo, mi ser y conciencia antirracistas comienzan a rebelarse contra mis racionalidades, y a tomar nota de algunos hechos que me impulsan a escribir por lo menos estos apuntes, de inicio autorizados a libre circulación. Así pues, aquí van mis “paranoias”:

1.- ¿Por qué la visceralidad de algunos ataques a Zurbano? ¿Acaso la promoción de una urgida y urgente cultura del debate no obliga a saber lidiar en respeto con enfoques erróneos o desmedidos, de suponer que los de Zurbano lo sean? Silvio Rodríguez aconsejó "no caerle en pandilla".Por mi parte, recuerdo las numerosas diatribas que la prensa cubana dedicó al MENSAJE DE LA CONFERENCIA DE OBISPOS CATOLICOS DE CUBA «EL AMOR TODO LO ESPERA»(septiembre-1993)(3),las cuales obligaron al intelectual católico y REVOLUCIONARIO Cintio Vitier a apuntar una frase en un artículo suyo publicado a los efectos en Granma, que parece caída del cielo para la actual polémica:"firmeza en las convicciones, moderación en el lenguaje".De paso, reléase la pastoral de marras: varias de sus proposiciones son hoy POLÍTICAS DE GOBIERNO.

2.- Zurbano destituído de su cargo dirigente en la Casa de las Américas. Por ningún lado he visto Resolución que contenga los "por cuantos" y "por tantos" por los cuales se sanciona. A mí, como cubano de a pie,"se me dice" que fue por la publicación de un artículo polémico en el New York Times ¿Y si fue porque lo sorprendieron dentro de la institución mientras practicaba sexo con una pandilla de nórdicas? Inexplicable, muy inexplicable el silencio de la Casa de las Américas, si parto de que por ahora el escenario del debate es La Jiribilla.

Asimismo, una observación sobre Zurbano: acabo de enterarme de que un FUNCIONARIO CUBANO de ese nivel puede publicar en el New York Times sin determinadas autorizaciones, y no es una particularidad criolla: cuando aceptas ciertas responsabilidades, aceptas también limitaciones a las sacrosantas libertades humanas. Mi impresión, por ahora, es que los superiores de Zurbano se “desayunaron” con el artículo de marras. Manuel David Orrio será un “héroe oficial”. Pero decidió no militar en el Partido Comunista, entre varias razones, para que tal militancia no interfiera en su polémico “ser” periodístico. Nada de “inocencias”, por favor, que bien se me conoce.

3.- ¿Esfera pública, debate público, que en este caso interesa a toda Cuba? Coincido plenamente con Víctor Fowler cuando expresa en su aporte a la polémica que "…es justo agradecer la existencia del nuevo circuito de discusión donde antes había casi nada, pero también recordar que reducir el debate sobre cualquier tema de alcance nacional a lo que ocurre dentro de una pequeña parte del ámbito académico, secuestra la posibilidad de debate público en lugar de potenciarla. Hay que insistir en que el debate académico a ningún nivel (incluso la publicación de un libro), ni el mejor sistema de conmemoraciones posible, ni la realización de esta o aquella reunión sustituyen al debate público en su capacidad de estremecimiento y penetración en las conciencias. El debate público es la suma de todas las tribunas de opinión que el país puede ofrecer a sus ciudadanos (en negritas, por Orrio); o sea, que no es cuestión de calificar como experto, sino de exponer la voz como ciudadano." (4)

“Preguntas del bobo": ¿Cómo es posible que UNA VEZ MÁS los medios de difusión de verdadero alcance para el cubano de a pie permanezcan en silencio? ¿OTRA VEZ MÁS se tendrá algo parecido a la "guerrita de los e-mails", habida cuenta del bien pobre acceso del sufrido Liborio al Internet? ¿Qué pasa, no hay pantalones o faldas para abordar esta polémica en los periódicos impresos, la radio, la TV en general y en particular su programa Mesa Redonda? ¿Más de lo mismo, a las puertas del Congreso de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC) y con Raúl Castro “tocando a degüello” contra los “excesos de secretismo”?

¡Por favor! ¡Que nadie me diga que este debate no es NOTICIA! ¡Que nadie me diga que no es “políticamente correcto” abordarlo en programa televisivo como la Mesa Redonda, o que “le vamos a dar armas al enemigo”! ¡No me jodan, coño, que de vez en cuando las palabrotas valen oro, diría Raúl Roa, NUESTRO Canciller de la Dignidad!

Entonces, me “embarqué”; me “meto en la bronca”. Primero por CIUDADANO; segundo por periodista revolucionario; tercero por mi familia negra y cuarto — no tomen en cuenta el orden de prioridades –, por algunos negros y mulatos “segurosos” que me demostraron ser más que hermanos; por mis “aseres prietos” del Barrio Chino, y también por gente como Yamilé Fagés Plasencia, capaz de haber concluído una carrera universitaria, pese a nacer sin brazos ni piernas.

Y, como Nicolás Guillén en una ocasión, punto, fecha y firma. Así lo dejo escrito.

Notas:

1.- Para consultar todo el debate que tiene lugar en La Jiribilla ir a:

http://www.lajiribilla.cu/articulo/4402/debate-racial-en-cuba

2.- “Envía el General de Ejército Raúl Castro, mensaje de saludo a delegados al VI Congreso de la ANCI. La propuesta de creación de una ley para discapacitados que unifique, implemente y regule las diversas normas y resoluciones que existen en el país para la atención a las personas con limitaciones, recogió el espíritu de las discusiones del VI Congreso de la Asociación Nacional de Ciegos y Débiles Visuales (ANCI), que inició aquí sus sesiones de trabajo este jueves, con la presencia de más de 300 delegados e invitados de toda la nación…”

http://newsgroups.derkeiler.com/Archive/Soc/soc.culture.cuba/2005-1…

3.- MENSAJE DE LA CONFERENCIA DE OBISPOS CATOLICOS DE CUBA «EL AMOR TODO LO ESPERA» Septiembre 1993

http://www.palabranueva.net/contens/0809/000102-6.htm

4.- Víctor Fowler. Derivas con (por, y desde) Zurbano: Dolor, alegría y resistencia.

http://www.lajiribilla.cu/articulo/4278/dolor-alegria-resistencia

Publicado en Hermes

Cuba no tiene una ley de protección animal

Por Isbel Díaz Torres


Hace algunas semanas el programa televisivo La Mesa Redonda, célebre por sus aburridas sesiones de monólogos y sus sesgadas aproximaciones a los contenidos que toca, tuvo el buen tino de abordar el tema de las regulaciones ambientales en Cuba.

Me dispuse de buena gana a escuchar los más agudos conflictos que enfrenta la legislación cubana sobre el tema.

Según el periodista Randy Alonso, encargado de dar la seña para que cada integrante de la mesa diga lo que lleva escrito en sus papeles, el programa respondería a las cuestiones siguientes: ¿Cómo está establecida la legislación ambiental en nuestro país? ¿Cómo se cumple? ¿Qué se hace para hacerla efectiva? ¿Quiénes la violan y cómo se enfrentan?

Altos directivos del Ministerio de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente, y del Ministerio de la Agricultura describieron cómo está estructurado el sistema cubano. Sus aproximaciones, en todos los casos, dejaron al descubierto la visión utilitarista con que se entiende el medioambiente en nuestras instituciones investigativas.

La necesidad de una legislación ambiental, según esta visión, viene dada por la obligación de proteger los recursos naturales del país, en tanto estos son necesarios para su desarrollo económico. Es por ello que, aunque mencionaron que una televidente pidió una ley para el bienestar animal, el tema no volvió a tocarse.


El término recurso ambiental coloca al resto de la naturaleza, de la cual somos parte integrante, en posición de deseable mercancía. Todo el conocimiento que logremos conquistar, sería para explotarla al máximo. Es una relación cosificada, que nos enferma de cinismo, y diluye cualquier espiritualidad posible. Continue reading