Coge tu capitalismo cubano aquí! (V)

Los sujetos están omitidos: Si TÚ produces, NOSOTROS tendremos más ingresos… (poster por el XX Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba, en una calle habanera)

Una Casa Verde para Cuba

Por Isbel Díaz Torres

casa-cuba-florecidaHAVANA TIMES — El Laboratorio CASA-CUBA nos ha dotado de un magnífico instrumento para el trabajo colectivo con sus recientes “Propuestas para nuestro porvenir inmediato”.

Aunque debo reconocer que la mayoría de las veces descreo de los documentos y declaraciones públicas de esta índole (me parecen solo letra muerta), no puedo dejar de reconocer que en algunos casos, cuando la propuesta es presentada con un sentido dialógico y cierta diafanidad, es posible que genere una utilidad real.

Ello es lo que he percibido hasta el momento. Con excepción quizás de las desinformadas e inexactas impresiones promovidas por el bloguero Alejandro de la Cruz,  el documento mencionado ha tenido una muy favorable repercusión, incluidas lecturas críticas del texto, y ha permitido hacer converger en un mismo empujón, varios discursos que pululan en el paisaje de ideas de la sociedad cubana actual.

Ello me ha animado, con humildad y admiración hacia los autores y autoras de las “Propuestas”, a reflexionar sobre una idea, estimulada a raíz de la lectura del documento.

En el punto número 12 se nos propone “Asegurar eficazmente el derecho al trabajo y las garantías laborales; así como las libertades económicas necesarias, y subordinar la ejecutoria económica a compromisos sociales y ambientales”.

Con tal propósito no puedo estar más que de acuerdo, por supuesto, pero me hizo darme cuenta que esa “Cuba soñada”, esa “Cuba futura”, carecía de una intencionalidad más marcada hacia el cambio de paradigma de desarrollo, crítica de la lógica consumista y depredadora del medio ambiente. Continue reading

Coge tu capitalismo cubano aquí! (IV)

Entrada de la Editora Abril, de la Unión de Jóvenes Comunistas (justo frente al Capitolio)…

Vigencia del capitalismo

Por Félix Guerra

La vigencia del capitalismo hasta hoy día, su casi eterna contemporaneidad en agonía, se debe o puede deberse, básicamente, a algunos acontecimientos y realidades del mundo en que hemos vivido durante el pasado siglo XX. Pasemos lista.

EN PRIMER LUGAR

Su gran capacidad de reinventarse. De rehacerse a partir de una y otras crisis. De su habilidad de asimilación, estimulada siempre por recompensas diversas y ganancias mercantiles. Discurso, oratoria, publicidad y propaganda, arte, además de ideología, se reprograman así casi de forma cíclica y constante para prometer y facilitar nuevas expectativas sociales. Su arsenal ha estado dotado de variadas exitosas manera de alargar el estirón.

Su destreza y arte, con recursos de comunicación amplios, para utilizar tormentas de ideas al gran nivel social, que desataron en su momento desarrollos y consecuentes auges cíclicos de consumos, industria, agricultura, tecnología, ciencia, estética y finalmente de producción (no previstos en amplitud por teóricos de la economía ni clásicos del marxismo).

Su capacidad de refundarse económicamente, de acuerdo y con arreglo a las bases productivas en movimiento, tanto en aspectos sociales, culturales, científicas y tecnológicas, como en imaginerías y esperanzas. Continue reading

Un acercamiento a las celebraciones oficiales por el aniversario del barrio obrero de Pogolotti (y a la apatía popular)

Por Marcelo “Liberato” Salinas

1.

Tato Quiñones durante VI Foro Social Observatorio Crítico - Foto Isbel Díaz Torres

Tato Quiñones durante VI Foro Social Observatorio Crítico – Foto Isbel Díaz Torres

En la tarde del domingo 22 de febrero, asistí a un conversatorio sobre la contribución de la sociedad fraternal abakuá a la historia de Cuba, organizado por la Comisión Organizadora de los festejos por el 102 aniversario del barrio obrero de Pogolotti. Para el encuentro la Comisión barrial le encargó a Tato Quiñones que escogiera libremente una cuestión dentro de ese amplio tema.

La cita se produjo en los locales del centro deportivo Jesús Menéndez, del barrio de Pogolotti, en los terrenos de la antigua finca de la investigadora Lydia Cabrera, según me informó Tato Quiñones antes. ¡Qué sorpresa me llevé cuando entré a ese local! Nunca había puesto los pies dentro de ese centro deportivo y me sorprendió la magnificencia, la calidad constructiva, el uso de la luz natural, los vitrales y el concepto multipropósito que animó ese diseño, todo para disfrute popular.

Una piscina olímpica, diversas áreas deportivas bajo techo y al aire libre, cafetería, todo de una calidad prodigiosa. Pero lo que no me esperaba era que dentro del centro deportivo hubiera un cine-teatro con todas las de la ley, con capacidad para cientos de personas. De golpe, sentí toda lo que debió significar la revolución socialista de 1959 para los vecinos de este barrio, frente a una obra constructiva de estas proporciones para todos los vecinos sin restricciones, donde me cuentan que el Che Guevara se empeñó a fondo para llevar a término estas obras para 1963.

Medio siglo después esta espléndida construcción se sostiene por la inercia de su impecable calidad. Una piscina olímpica ya irremediablemente vacía; una cafetería amplia e iluminada, pero casi siempre mustia en su oferta más allá de ron y cigarros y vacía de vida social; un cine teatro abandonado, polvoriento, sin iluminación, pero que al menos conserva intacto sus asientos, es el panorama que presenta hoy el centro deportivo

2.

En el cine-teatro, rodeados del infaltable reggaetón que inundaba la explanada casi vacía de las áreas deportivas, se efectuó el conversatorio con Tato Quiñones, con la asistencia de unas 15 personas, la mayoría funcionarios de la Dirección Municipal de Cultura, abrumados por el inmenso vacío que rodeaba a los que allí nos encontrábamos. Casi todos mayores de 50 años, excepto una florecida adolescente que resultó ser una excelente declamadora. Ella, luego de hacer lo que le pidieron los guionistas del encuentro, se fue del local, a pesar de la insistencia de dos funcionarios. Continue reading