Mensajes ciertos de una Naturaleza caliente

Por Rogelio M. Díaz Moreno

Esta nota salió en el sitio cubano Cubaliteraria, y quería compartirla con quienes leen el blog del OC. Espero se diviertan en la polémica y les sea de provecho.

La celebérrima revista científica Nature despliega, en la portada de su número 7426 que corresponde a la última semana del mes de noviembre un mensaje de inconfundible olor a chamusquina: Llegó el calor.

Con los materiales disponibles lo mismo en las páginas de la revista que en su sitio web, quedan abundante y nítidamente expuestas las evidencias sobre el fenómeno del calentamiento global, así como la responsabilidad que le corresponde a nuestra civilización, fundamentalmente por las alteraciones que provocan las emisiones de gases de efecto invernadero.

Antes de seguir, y para quienes sientan la curiosidad: puedo acceder a Nature desde mi trabajo, a través del portal de la salud cubano, Infomed.

Ojalá el mensaje presente en el editorial calara más profundamente en los comportamientos de los seres humanos, deseamos todos los que nos duele ver el deterioro de las condiciones medioambientales. Sin embargo, ante el inminente fin del período cubierto por el Protocolo de Kyoto (el próximo 31 de diciembre) los grandes protagonistas de las políticas mundiales no han podido o deseado establecer acuerdos y códigos de conductas más considerados con el planeta que nos sustenta, para remediar la contaminación de sus aguas, de su atmósfera, y detener o mitigar el calentamiento galopante del clima.

Este último fenómeno ya constituye parte de la ciencia establecida, como concuerda la abrumadora mayoría de la comunidad científica, y sus evidencias son señaladas por doquier por parte de instituciones académicas, tales como el Panel Internacional del Cambio Climático, establecido a nivel de la Organización de las Naciones Unidas. En el número presente de Nature se aborda, por ejemplo, la situación del deshielo en los polos y en Groenlandia, tal como la expone Olive Heffernan.

Por su parte, Quirin Schiermeier introduce algunos análisis respecto a la evolución de las actividades e intereses económicos involucrados detrás de las negociaciones mundiales sobre el clima. Como resultado, pronostica un solo futuro tras el fin del Protocolo de Kyoto: Aire Caliente. En su trabajo, expone las inconsecuencias de varias naciones más desarrolladas, verbigracia, los Estados Unidos, seriamente nocivas para todos los intentos de afrontar el problema de una manera constructiva. De igual forma, extrae algunas moralejas de importancia a partir de la concatenación de acontecimientos resultante de la interacción de los movimientos internacionales envueltos en el tema. El problema, se puede apreciar, se presenta mucho más complicado que la solución al agujero en la capa de ozono o la reducción de arsenales nucleares, pues involucra intereses económicos, las diferencias en desarrollo de las naciones del planeta y cuestiones de justicia social, tanto como tecnológicas y geopolíticas. Para colmo, ante el creciente precio del petróleo, muchas potencias se vuelven hacia el carbón, aún en abundancia relativa y más contaminante todavía que el petróleo o el gas natural. Los criterios de varias autoridades citadas dan fe de las dificultades que se avecinan, que difícilmente puedan ser resueltas exitosamente en el exiguo plazo que le queda a la humanidad para evitar un trastorno irreversible.

Con estas perspectivas, no es de extrañar que Heffernan recomiende: Si no hay vuelta atrás, adaptémonos. El autor no hace más que señalar la tiznada realidad que toca nuestras puertas, y la tendencia presente en sociedades y países a aplicar medidas que les permitan lidiar con las consecuencias del cambio. Ya que el tiempo se volverá inestable, con condiciones meteorológicas extremas, lo mejor es estar preparados, piensan muchos sin que les falte razón. También es cierto que la adaptación a los campesinos de un país paupérrimo o los habitantes de un islote coralino será muy diferente a la de los residentes de urbes norteñas de poderosas infraestructuras, como no se deja de contemplar en el este material. Las inundaciones, sequías, olas de calor y otros problemas estarán a la orden del día y exigirán grandes cuotas de sacrificios.

Dieter Helm contempla con preocupación la tendencia al incremento en el uso de carbón en las naciones europeas. En naciones como Alemania se están incluso sustituyendo centrales electro nucleares por este otro combustible, con desastrosas consecuencias para los niveles de contaminación esperados. La aplicación urgente de nuevas tecnologías dentro de las que se incluyen las renovables y las nucleares así como un accionar más enérgico contra las emisiones de gases de efecto invernadero, impuestos y otras medidas, son imperiosas para conservar un planeta medianamente saludable, recalca, después de que la filosofía aplicada en el Protocolo de Kyoto ha terminado de mostrar su insuficiencia. Jeff Tolleson y Richard Monastersky despliegan varios gráficos que ilustran las preocupantes tendencias hacia la mayor contaminación .

Los entresijos de la política del comercio con créditos de carbón son expuestos por Michael Grubb. La diplomacia climática gira intensamente alrededor de estos mecanismos, sugeridos originalmente en los Estados Unidos y que alcanzaron gran auge en la Unión Europea. Esta política está lejos de ser universalmente celebrada, y Grubb expone disímiles ventajas y desventajas que se despliegan en los campos de discusión y análisis.

Tollefson retoma la palabra para ofrecer algunas consideraciones sobre lo debatido en la Cumbre de Doha. En la ciudad sudafricana se volvió a discutir el estado de los esfuerzos para conservar el medio ambiente luego del fin del período cubierto por el protocolo anterior, y se desplegaron los últimos intentos por establecer políticas de consenso, en el actual decenio, que eviten lo peor. Como en el caso anterior, las dificultades parten de los diferentes grados de compromiso de naciones desiguales en desarrollo e intereses.

¿Qué hace Ahmadineyad en Cuba?

Por Irina Echarry

Ahmadinejad gay

No tenemos homosexuales en Irán... ya.

Mucha gente se hace esa pregunta. Incluso, recibí dos llamadas invitándome a protestar por su visita. Una llegó tarde, ya el iraní estaba despegando de suelo cubano. Y la otra, la persona que la hizo se arrepintió, diciendo que no valía la pena y solo levantaría sospechas sobre nosotras.

A mí, que no me gusta llamar la atención y que además soy miedosa, no me animó lo de pasear las calles con carteles, pero tampoco me gustó la visita de uno de los presidentes que más presos de conciencia tiene y que más penas de muerte ejecuta en su país.

Intento ser tolerante, comprendo que hay protocolos que cumplir, sobre todo entre gobiernos, pero de ahí a que lo premien. Eso sí que no lo entiendo.

Ahmadineyad llegó a Cuba haciendo el símbolo de victoria con los dedos, sonriendo, quizá satisfecho de tener tantos/as prisioneros/as políticos, condenar a la horca o a la lapidación a tantos/as homosexuales, conversos/as al cristianismo y miles de mujeres (estas últimas incluso solo por supuesta infidelidad.

Ya sé que vivimos culturas diferentes, y precisamente por eso no debemos juzgarlo ni para bien ni para mal.

Sin embargo, el gobierno cubano le abre las puertas, le otorga el título Honoris Causa en Ciencias Políticas y además le da la palabra.

Entonces debemos escuchar su ironía cuando hace alusión a un nuevo orden mundial basado en la justicia y en el respeto a todos los seres humanos.

No sé si es cierto que Irán produce uranio empobrecido al 20 %, tampoco sé si el pueblo iraní aprueba el desarrollo del programa nuclear del país.

Pude haberme enterado de algo a propósito de su visita, pero en la prensa nacional sólo se dijo que es antimperialista y que piensa que el sistema capitalista está en decadencia.

Intento imaginar qué vino a hacer aquí, a un país donde por suerte ya hace unos años que no se ejecuta a nadie.

No me explico cómo el gobierno cubano que está abogando por cambios de mentalidad, (supuestamente para avanzar, prosperar, mejorar), recibe a un hombre con una política tan retrógrada, antifeminista, homofóbica, antiambientalista y belicista.

No entiendo, creo que me estoy perdiendo algo y no sé si algún día me entere.

Publicado en Havana Times

Para que Nestlé quiebre en Cuba

Por Alfredo Fernández

nestleDías atrás me asombré cuando una amiga española me preguntó “¿cómo era posible que un gobierno como el cubano que desde hace más de cinco décadas pregona a voz en cuello por todo el mundo su postura en defensa de las causas justas, haya permitido la entrada al país de una transnacional como Nestlé?.”

Resulta que hoy la multinacional de productos lácteos lidera sin contratiempos, la venta de los helados en la red de tiendas por divisas del país.

Ante tal pregunta, me fui a Internet y una breve búsqueda en google, me arrojó al extenso prontuario de información sobre el proceder del  líder heladero en Cuba.

Boquiabierto quedé al conocer que la para mí tan “encumbrada empresa” ha amasado su fortuna a fuerza, ya sea de enormes despidos laborales, la tala de inmensas extensiones de bosques en todo el mundo y “la asfixia” de los pequeños productores de leche y agricultores en continentes como América y Asia.

Yo ignoraba hasta  ese momento semejante situación, pues mi pésima relación con Internet, más una prensa nacional que sólo aborda temas “previamente autorizados” impidieron que desconociera hasta hoy la verdad sobre Nestlé. Continue reading

Carta a Silvio Rodríguez de Marfrey Cruz Medina

Sábado, Noviembre 26 y 2011

Estimado Silvio:

Mi nombre es Marfrey Cruz Medina, tengo 27 años y vivo en San Antonio de los Baños, soy poeta, anarquista, cristiano, ecologista. Esta precoz y casi rotunda identidad no es vanidad sino búsqueda profunda y dolorosa. Lo digo para pecar de usar un lenguaje directo y sencillo desde el principio. No usaré la estrategia maniquea de elogio/ataque para persuadirlo. Los amigos se dicen la verdad. No necesitamos conocernos (formalmente) los que amamos la vida y el mundo. Tampoco necesitamos prosélitos ni consentimos idolatrías. Nos une el amor al barro del que estamos hechos. Ambos nacimos en las orillas del Ariguanabo, somos hijos de la humedad y los reflejos.

Hemos recibido con mucha alegría la noticia de tu concierto el 4 de diciembre en el Paradero del Tren. Es la oportunidad que estábamos esperando para agradecerte y compartir juntos al menos dos horas de poesía y música vital.

Seguro que te aturdirán los burócratas de la cultura de la cursilería y el peñasco (cursos y peñas son las únicas opciones culturales actuales además de los provectos y reaccionarios proyectos de “rescates de tradiciones/abolengos”) con el entusiasmo típico de los devotos del Homo Ariguanebensis. Son los mismos que han convertido la “Villa” en escombrera y basurero. No te prevengo, sé que los conoces. Solo quisiera contarte los hechos más recientes de tan distinguidos personajes.

Hoy se debió realizar el Primer Festival Cultural ArtEco: Arte, Ecología y Comunidad ¡Por Amor ala Tierra! en El Paso del Soldado, un evento comunitario que veníamos organizando hacía un mes el ColectivoLa Ruedacon los recursos y esfuerzos de las personas y artistas de la comunidad, incluso, sin ellos. Fue suspendido por el Sr. Co. Director Municipal de Cultura, ayer (en la noche) sin explicaciones ni tiempo para avisarle a la gente.

Muchos niños se disfrazaron para el pasacalle, sus familiares llevaban días inventando los trajes de payasos, gitanas, indios y piratas, aprendiéndose canciones y poemas para recitarlo, adornando sus perros y chivos, seguro, soñando. ¿Cómo le explicas a un niño tanta idiotez y abuso?

Las razones dadas fueron absurdas. Ese mismo día en la mañana unos vecinos vieron como dos personas en moto arrancaban las promociones que con tanto esfuerzo logramos hacer, cuando le preguntaron el porqué hacían eso, ellos contestaron que se lo llevaban “pá allá arriba” (haciendo referencia a sus jefes). Los instructores de arte y artistas involucrados fueron llamados e intimidados, y dos miembros de nuestro Colectivo fueron citados para la DirecciónMunicipalde Cultura. Mientras se les hacían preguntas como: qué era eso de performance, foro público, recogida de ropa y juguetes usados, tienda de trueque, y sobre todo qué queríamos decir con ¡Apoya a tu Comunidad, Únete al Cambio!, sus nombres, apellidos y centros de trabajo fueron dados a “alguien” que llamaba y que no se identificó. Continue reading

Un Guardabosques para velar por los espacios verdes

Por Elaine Díaz

El Guardabosques es un proyecto iniciado en enero de 2007 por un grupo de jóvenes cubanos con el objetivo de “contribuir a un mejor manejo de los espacios verdes” que incluye la publicación de un boletín electrónico, de suscripción gratuita, para la “denuncia de depredaciones antiecológicas en el entorno urbano”.

“Todo comenzó en diciembre de 2006”, cuenta su fundador, Isbel Díaz, en exclusiva para Global Voices. En esa fecha ocurrió la “tala indiscriminada de una ceiba centenaria en el barrio de San Agustín”. Este árbol, símbolo de la capital cubana y patrimonio cultural de la nación caribeña, es respetado por todos los habitantes del país.

La denuncia de este hecho se realizó por correo electrónico a cientos de receptores donde se incluyeron tanto ciudadanos como instituciones gubernamentales. “La respuesta fue increíble”, comenta Díaz, “y nos impulsó para realizar la primera acción: editar un boletín digital”.

Así nació El Guardabosques, “sin nómina fija ni nada parecido”. Según Díaz, “A partir de un núcleo inicial de unas cinco personas, todas vecinas de San Agustín, se han ido sumando puntualmente personas y colectivos a este trabajo. Hay quienes han estado solo en la siembra de una postura y nunca más hemos coincidido, y están quienes han participado en casi todo lo que se hace.”

Pero, lo más significativo de este proyecto tiene que ver con su carácter inclusivo y democrático. Para participar en El Guardabosques no existen límites de edad, género, orientación sexual, creencia religiosa, militancia política o estatus económico.

Durante más de cinco años, la difusión del boletín en la red se ha complementado con una centena de acciones de limpieza en ríos, mares y vertederos de basura. Además, han implementado proyectos comunitarios para la siembra y el cuidado de los árboles junto a infantes y han participado en eventos teóricos como el panel “Pensamos Cuba” que coordina la Asociación de Hermanos Saíz.

Actualmente, El Guardabosques es recibido por casi 1000 destinatarios de correo electrónico. El 78 por ciento de estos receptores son residentes en Cuba que acceden desde la red interna, fundamentalmente en universidades, institutos de investigación, instituciones culturales o artísticas.

En junio de 2009, El Guardabosques se integró a la Red Protagónica Observatorio Crítico que incluye una docena de proyectos sobre infancia, diversidad sexual, raza, informática, promoción cultural, entre otros. Durante la IV edición del encuentro de esta red en 2010 los participantes comenzaron con la siembra de una postura de Anacagüita en un círculo infantil.

Cuenta el boletín que: “Trabajadoras del centro, encabezadas por su amable directora, niños de la comunidad, miembros de la Red Protagónica Observatorio Crítico, e invitados al evento decidimos colectivamente el mejor sitio para sembrar el arbolito, cavamos el hoyo, y sembramos y regamos la planta”

La muerte de la ceiba de San Agustín en 2006 no quedó impune. La juventud que actualmente integra El Guardabosques ha ampliado su red de ambientalistas y comienza a crear sus propios espacios para el intercambio con otros proyectos. Cada vez es mayor el número de personas que se acercan para denunciar alguna problemática ambiental o para mostrar su apoyo a la causa ecológica.

En su reivindicación de los espacios verdes, los integrantes de este proyecto reconocen el papel de la tecnología y las redes virtuales en la creación de una ciudadanía vigilante. Según Isbel Díaz, las redes permiten construir “sus propios canales de comunicación para denunciar las acciones de privados o instituciones estatales que infringen la legislación, o que amparados en las lagunas de esta, dañan el medioambiente”.

Publicado en Global Voices

Este artículo se encuentra disponible en los idiomas: español, portugués, italiano, francés, inglés, árabe y chino

Más detalles sobre la arboleda de Santa Fe

Por Isbel Díaz Torres

El proyecto El Guardabosques ha encontrado más informaciones sobre la tala total de una arboleda de casuarinas en la localidad de Santa Fe. Por el momento, las labores constructivas están paralizadas.

Seguramente muchos lectores conocen que trabajo junto a un grupo de activistas en un proyecto ecológico denominado El Guardabosques. Algunas de estas personas me han proveído de informaciones muy interesantes sobre lo sucedido en Barlovento.

He sabido que los inversionistas de las obras, pertenecientes al Ministerio del Interior (MININT), estuvieron esperando durante casi dos años por el permiso de construcción. También debieron esperar varios meses por la autorización para el movimiento de tierra.

Ese detalle es significativo pues, con tanto tiempo de antelación, pudieron haber informado a las autoridades locales del Poder Popular y a la población sobre sus intenciones. Queda claro que no se sentían en el deber y la obligación de hacerlo.

Según una de las fuentes, que prefirió no ser identificada, la tala realizada posee una licencia de “forestales,” pero no aclaró si se refiere al Servicio Estatal Forestal, que es la entidad encargada de otorgar tales licencias. La arboleda contaba con un ejemplar de Palma Real, lo cual les preocupaba a los militares, por la posible complicación del proceso de otorgamiento de la licencia.

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Cuba prepara nuevos campos de golf socialistas

Por Isbel Díaz Torres

HAVANA TIMES, 14 oct. — Ya es conocida la noticia que Cuba permitirá que extranjeros adquieran propiedades a perpetuidad en modernísimos campos de golf enclavados aquí. El objetivo final parece ser edificar enormes complejos residencial-hotelero-golfista para los turistas y la futura burguesía cubana.

EN SUS MARCAS… LISTO… FUERA…

“Nos dijeron que esta incursión es la máxima prioridad en inversión,” ha declarado Graham Cooke, arquitecto canadiense de campos de golf, diseñador de un proyecto para Playa Guardalavaca, en la costa norte-oriental de la isla. El proyecto, cuyo monto asciende a más de $455 millones de dólares, es promovido por un consorcio de indígenas canadienses, y debió firmarse a principios de agosto de este año.

Según el ministro de Turismo de Cuba, Manuel Marrero, el gobierno negoció con varias compañías extranjeras la constitución de las primeras empresas mixtas que construirán estos campos de golf en Cuba y los “desarrollos inmobiliarios” turísticos correspondientes.

La empresa Standing Feather International (SFI) firmó un memorando de acuerdo con el gobierno cubano a finales de abril, y el pasado 6 de julio acordó crear junto con la compañía estatal cubana Grupo Palmares, la empresa “Cuba-Kanata Golf SA.” Ellos serán los primeros en construir, labor que debió comenzar en septiembre, aunque la cuestión no ha trascendido en los noticiarios ni prensa escrita de la isla.

También se conoce que el director ejecutivo del londinense Esencia Group, quien ha contribuido a patrocinar torneos internacionales de golf en Varadero, planea hacerse de un club campestre de $300 millones en la más famosa de las playas cubanas.
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Maria Aguilar, una exótica playa cubana o lugar de exclusión

Por Yenisel Rodríguez Pérez

La camioneta nos dejó en la franja de la playa destinada al parqueo de autos. Estábamos muy cerca de la cuidad de Trinidad, quizás a unos 20 kilómetros. Es una cercanía que acrecienta el disfrute veraniego en la playa, pues al horizonte la bella ciudad de la región central de Cuba nos entrega una acuarela dieciochesca de fachadas coloniales.

Es Playa Maria Aguilar, un hermoso arenal costero del litoral sur cubano. Los trinitarios la aprecian por su abundante arena y la ausencia de espesos arrecifes en sus orillas. En ella el chapuzón se hace más seguro y placentero que en otras playas de la zona; de ahí viene la gran popularidad que se ha ganado entre los bañistas, muy a pesar de ser una de las playas más distante de la ciudad.

Por eso a los pocos minutos de estar en la playa me sorprendió el reducido número de bañistas que disfrutaba del lugar. No pasaban de 15 personas. Todos los presentes habíamos arribado en vehículos estatales o particulares, los pocos en coches de tracción animal, pero por ninguna parte se veía llegar esas multitudes de jóvenes y familias condenadas al andar a pie o al hacinamiento en transporte público para lograr llegar a las distantes playas.

Este sector poblacional generalmente representa más del 50 porciento de los bañistas que visitan nuestras playas públicas. Continue reading

Juventudes en Cuba: otras revoluciones

Debate IPS – Isbel Díaz Torres

La mayor población de jóvenes jamás registrada está cambiando nuestro mundo y nuestro futuro, afirma uno de los mensajes del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), en ocasión de la celebración este 11 de julio del Día Mundial de Población.
Según Naciones Unidas, los jóvenes, plenos de energía y receptivos a las posibilidades dimanadas de las nuevas tecnologías, están transformando la política y la cultura y están marcando el rumbo respecto de la prevención del VIH. Las opciones que efectúen determinarán nuestro futuro común.

¿Cómo se ve la juventud cubana, cuáles son sus aspiraciones y cómo sueña su país? Un debate de la Redacción de IPS en Cuba por el Día Mundial de Población y el Año Mundial de la Juventud.

1. ¿Qué diferencia a la juventud cubana actual de otras generaciones con las que convive?

La principal diferencia que veo es la falta de un proyecto colectivo de construcción social. Las generaciones previas tenían ese proyecto, y se alimentaban (al menos espiritualmente) de él. Ese proyecto pudo ser más o menos excluyente, pero no interesa aquí evaluarlo como proyecto en sí, sino el significado que tuvo su mera existencia. La juventud actual no tiene ni ese, ni ningún otro proyecto. El esquema anterior no concibió el reciclaje de los actores sociales (al menos no en la práctica), de modo que, manteniendo los mismos actores, fue ejecutando sus concepciones de desarrollo, bienestar social, realización personal, o éxito profesional, al margen de quienes fuimos llegando después.

Aquellas generaciones esperan que los jóvenes de hoy sean dignos herederos, pero con el nivel educacional alcanzado y los increíbles volúmenes de información que manejamos hoy los jóvenes ¿quiénes querrían ser herederos de algo que construyeron otros?

El término generación implica, por supuesto, una ruptura, y eso es lo más palpable ahora mismo. No obstante, considero que una mirada más despegada podrá darnos un panorama de continuidad. La inconformidad de nuestros jóvenes es parte también del legado de las generaciones anteriores (que no es una sola, y cuyos niveles de comprometimiento/disenso no han sido uniformes tampoco).

2. No pocas personas repiten el viejo cliché de que la juventud está perdida. ¿Perdida para quién o para qué? ¿Se podría hablar de una pérdida de valores en la generación joven o del surgimiento de nuevos valores y formas de ver la vida?

Que la juventud no esté donde algunos desean, no significa que esté perdida. Quizás está simplemente en otro lugar. Quizás se necesite una manera distinta de mirar para poder verla y poder justipreciar sus valores. Comprendo que es triste sentirse ignorados, pero quizás ese sea uno de nuestros valores: la capacidad de mirar para otro lado mientras el televisor nos habla. A veces, para construir algo nuevo, es preciso desintoxicarnos de todo lo viejo y retrógrado que nos rodea. Para ello podemos mirar al futuro, o bien atrás (pienso en el líder cubano y comunista Julio Antonio Mella cuando lo expulsaron del Partido Comunista), o simplemente mirarnos adentro. Ellos no están en ninguno de esos lugares.

No obstante, quiero aclarar que no me gusta sondear los posicionamientos de las personas desde la teoría de valores, pues casi siempre se cae en una trampa. Eso que llamamos valor tiene sentido para un grupo determinado de personas, en un momento dado, en un lugar preciso. Con algo tan voluble es casi imposible estructurar un discurso.

3. Las reformas que impulsa el país en materia económico-social, ¿tienen en cuenta el interés de la juventud que habita la isla? ¿Qué intereses y aspiraciones juveniles estarían no siendo atendidos por la actualización del modelo cubano?

Lo primero que se me ocurre preguntarme es si estamos los jóvenes diseñando esas reformas, y quiénes lo están haciendo por nosotros. Al responder a esas preguntas comprenderemos que ni siquiera interesa tanto las buenas intenciones, o que nos tengan o no en cuenta: es imposible atacar el paternalismo desde el paternalismo.

Desde mi percepción, las jóvenes generaciones ni siquiera están al tanto del grave proceso de cambios impuesto, que incluye un sensible retroceso en la esfera de protección en el ámbito social.

Recordemos, por otra parte, que esa juventud no es un todo homogéneo, y que las transformaciones en la agricultura que los muchachos y muchachas de la calle G (céntrica avenida en La Habana) miran con extrañeza, están siendo la realidad actual de muchos jóvenes en los campos cubanos.

4. Estudios realizados en Cuba han mostrado diferencias en la manera en que sucesivas generaciones han vivido y sentido su compromiso con el proceso social cubano, visto como la Revolución. ¿Cómo usted cree ha evolucionado ese compromiso y cómo se expresa entre las personas más jóvenes?

El compromiso con la Revolución ha ido mermando y en las nuevas generaciones es casi nulo. El impacto de las crisis económicas (en especial la que se extiende desde los años 90 del siglo XX), la huella de potencias extranjeras (como la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas) en nuestra visión de la economía y la política, y la persistencia de restricciones de todo tipo después de 1959, han demostrado que el proyecto ha carecido de la flexibilidad necesaria, incluso de la dialéctica imprescindible para enfrentarse a los retos de la construcción socialista. Los jóvenes que trabajamos en pos del socialismo, hemos comprendido hace un buen rato que ya no se trata de defender la Revolución, sino de desarrollarla, ampliarla, radicalizarla.

La ojeriza con que las viejas e intermedias generaciones nos miran, es signo inequívoco de su incapacidad para sorprenderse y sumarse. Sucede igual con muchas de nuestras amistades, que tampoco entienden nuestro compromiso con la Revolución, pero por razones diferentes. El endiosamiento del consumo, las necesidades materiales y los anhelos de realización personal, las hacen desdeñar (y hasta huir de) cualquier propuesta de desarrollo colectivo surgida de manera autónoma, sin el sello de calidad estatal.

5. Una mirada externa puede etiquetar a la generación más joven como apática políticamente. ¿Cómo valora la participación política de la juventud? ¿Tienen las personas jóvenes los espacios de expresión y participación necesarios para tener una presencia más activa en la construcción social?

Trabajo como activista de la Red Protagónica Observatorio Crítico (OC). Este colectivo, aunque no está formado exclusivamente por jóvenes, sí reúne a muchos con un tremendo potencial político. Hemos comprendido que los espacios de expresión y participación, para que sean verdaderamente auténticos y funcionales, debemos construirlos nosotros mismos; y eso hemos hecho. No solo construirlos, sino buscar en todas partes (desde el barrio hasta las instituciones) dónde existan otros lugares con esa potencialidad. El Taller Vivir la Revolución y el Centro Teórico-Cultural Criterios, junto a los muchos proyectos que asisten cada año al evento del OC, son buenos ejemplos de ello.

El vaciamiento de la capacidad transformadora de muchos de los espacios de debate y participación actuales, junto a los esquemas exclusivistas y las estéticas con que han sido diseñados, los hacen inútiles para las necesidades presentes. La fusión marca a la juventud cubana, y por eso los espacios puros ya no funcionan. El trabajador intelectual debiera dialogar todo el tiempo con los verdaderos actores sociales, y los casos donde ambas funciones se unen son los que considero con mayor capacidad transformadora. Eso es válido para campos tan diversos como la producción agrícola, el arte, la investigación científica, la religión, las luchas reivindicativas de sectores marginados, y muchos otros.

6. Las generaciones anteriores vivieron lo que se llamó una Revolución dentro de la Revolución. Esa otra revolución estuvo centrada en la llamada liberación de la mujer y su inserción en los espacios públicos. ¿Cuáles serían las otras revoluciones de este siglo XXI?

En lo que toca a mi sensibilidad, considero que la revolución racial, la revolución LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y trans) y la revolución ecológica han venido abonando el camino con más persistencia y su eclosión pudiera estar en nuestras manos. El término minorías debiera carecer de sentido en este mundo, y sobre todo en este país.

Ahora, mirando un poco hacia afuera, me parece ver en los jóvenes que me rodean unas ansias muy marcadas de libertad en el sentido más amplio de la palabra. Ello incluye la libertad de expresión, sexual, de ideología, de movimiento, de acción, de consumo. El ahogo que provoca haber alcanzado un nivel cultural y de instrucción en un ambiente constantemente limitado, es algo de lo cual todos deseamos desembarazarnos.

En la esfera productiva también pudiera producirse una revolución, si verdaderamente logran implementarse variadas formas de propiedad y modos participativos de asumir el control y la producción.

Isbel es coordinador del Ecoboletín El Guadabosques, y activista de la Red Protagónica Observatorio Crítico

Publicado en IPS Cuba